Pablo tiene doce años, una capa con escudo rojo y dorado, una varita de madera en la mano, y una cicatriz en forma de rayo sobre la frente. Como en los últimos seis años, relee siete libros que ya puede repetir de memoria. Pero este año es distinto. Es que hoy, en el día de su cumpleaños literario, Harry Potter vuelve a encantar con el lanzamiento de su nuevo libro, Harry Potter and the Cursed Child, y su hechizo fascina a niños y adultos con los eventos masivos que se celebran hoy, nuevas películas y hasta una obra de teatro.
El reloj marcó las 00:01 y la Potter-Manía se disparó en todo el mundo con los actos que celebran en simultáneo la salida del nuevo libro. La preventa de Harry Po-tter y el Niño Maldito rompió todos los récords y la editorial KEL, que organizó el tradicional evento de juegos, trivias y concursos de disfraces junto al Círculo de Lectores de Harry Potter (CHP), asegura tener ya tres mil ejemplares vendidos. El libro cuesta 538 pesos en su versión en inglés.
“Hace ocho años de la salida del último. Veníamos remando nuestra locura en privado, pero de repente: libro, película y obra de teatro. Es un momento de histeria colectiva”, ríe Juliana, miembro de CHP, y una de las miles que ya compraron su edición. La obra, escrita por el guionista Jack Thorne, se estrenó ayer en el teatro Palace de Londres, y es la octava entrega de la saga, protagonizada por uno de los tres hijos de Potter, Albus Severus.
“Es una historia triste, 19 años después de los eventos del último libro. Albus empieza Hogwarts y está ‘maldito’ y quiere romper el legado de su padre de hacer el bien”, explica Mercedes Raffo, del departamento de comunicaciones de KEL.
Padre e hijo. El legado es un tema que excede a la literatura y los fanáticos del universo mágico también trasladan su pasión y disfrute a sus herederos. Para dar vida el mundo de pociones y hechizos, muchos padres llevan a sus hijos a eventos temáticos, como la Magic Meeting. Cruzar el umbral del Colegio San José, en Azcuénaga 158, es adentrarse en la Escuela de Magia y Hechicería Howgarts, escenario de la saga.
Desde el mediodía de ayer y hasta la tarde de hoy, el colegio es la sede de la convención que reúne a miles de personas en su quinta edición y festeja el cumpleaños de la autora J.K. Rowling y de Potter con colas que hasta dan vuelta la cuadra. En la edición 2015 reunieron siete mil personas.
“Es un evento transversal en el que chicos que crecieron con el libro ahora lo comparten con sus hijos. ¡Ya hasta hay tres generaciones fanáticas de Harry!”, sonríe Amelia, que a sus 50 años, va con su hija de 25 y su nieto de 2. Entre clases de pociones y de duelo con varita y vasos con ‘cerveza de mantequilla’, miles de personas recrean la magia de los libros, inclusive el mismísimo Quidditch, un deporte que se juega sobre escobas voladoras, y que en su versión muggle es una mezcla entre rugby, handball y ‘Quemado’.
“Mis hijos crecieron entre libros, yo me hice fan y Pablo, mi hijo mayor, me preguntaba siempre hasta que, a los 7 leyó el primero. Daniel, el menor, a los 6. Desde ahí, leen los siete libros al menos una vez al año. Y yo, babeo”, se emociona Federico Firpo Bodner, que organiza eventos de lectura en escuelas primarias para compartir la magia Potter.
Bodner cree que estos eventos son algo hechizantes. “Son miles de personas jugando. Espero que eventos como éste sigan dándome la oportunidad de jugar hasta el último aliento, y que si algún día advierto que mis hijos empiezan a olvidarse, un relámpago en la frente y un hechizo sin fin me permitan arrastrarlos de nuevo al mundo real: ése que no puede concebirse sin magia”, finaliza.