SOCIEDAD
Controladores de vuelo

Denuncian a la Aeronáutica y dicen que hay "peligro" en el aire

El fiscal Federal elevó la denuncia formal contra Fuerza Aérea en la cual, además de declararla "responsable" por el caos en el control de los vuelos, admitió que los pasajeros viajan inseguros.

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El fiscal denunci responsabilidades en vuelos comerciales | Cedoc
El fiscal Carlos Rivolo calificó ayer como "delictivas" las conductas de los jefes aeronáuticos de la Fuerza Aérea, a quienes que acusó de manera formal ante la Justicia Federal, y afirmó que el comportamiento es propio "de quien tiene en sus manos la conducción y ejecución de actos que ponen en peligro la seguridad de una aeronave".

Rívolo aludió, además, al "peligro permanente para quienes deban viajar en aeronaves comerciales" por culpa de la "corrupción" en la Fuerza Aérea que "tiene la responsabilidad de controlar a la aviación civil y comercial en todo el país".

El funcionario judicial solicitó las indagatorias del Comandante de Regiones Aéreas, brigadier Carlos Matiak; del Director General de Tránsito Aéreo, comodoro Claudio Trisano; y del Jefe del Grupo Operativo Región Aérea Centro, comodoro Mario Asrim.

Rívolo lo hizo al formalizar la denuncia penal por irregularidades en la supervisión de vuelos comerciales -que quedó radicada ante el juez Norberto Oyarbide- y donde también imputó al vicecomodoro Jorge Herrera, jefe de Tránsito Aéreo de Ezeiza; al mayor Osvaldo José Costa (Jefe de División Centro de Control Aéreo) y al teniente David Bastian, Jefe de Control terrestre.

En un dictamen de 31 carillas al que accedió la agencia oficial Télam, Rívolo añadió que la norma penal tutela la seguridad del transporte aéreo, "más vulnerable que el terrestre y lo que se procura evitar son los peligros que puedan afectar el transporte de cosas o personas".

En ese escrito, el fiscal aludió a un "peligro permanente para quienes deban viajar en aeronaves comerciales" por el que culpó a la "corrupción" en la Fuerza Aérea, que "tiene la responsabilidad de controlar a la aviación civil y comercial en todo el país".

La introducción del extenso dictamen recordó que las irregularidades -ratificadas por testigos en la "investigación preliminar"- fueron denunciadas por el cineasta Piñeyro en su documental "Fuerza Aérea Sociedad Anónima", estrenado este mes.

"Los gravísimos sucesos acreditados en esta investigación preliminar encuadran en la calificación penal realizada", dijo Rívolo y puso como ejemplo el "tener pleno conocimiento del instrumental altamente deficitario y no advertir a los controladores o hacerlo tardíamente".

El fiscal también imputó a los acusados por ejercer "presiones laborales para que igual lo utilicen (ese instrumental obsoleto) con el riesgo que ello conlleva" y el "querer poco menos que 'obligarlos' a inventar trazas de vuelo" junto a "desoir airadamente las alertas permanentes sobre la situación reinante".

Según Rívolo, los imputados presionaron "constantemente en sus tareas (a los trabajadores) para que realicen operaciones contrarias a los reglamentos", además de "proveerles resúmenes con informaciones falsas", entre otras irregularidades.

El fiscal también quiere que se indague por el destino de las sumas de dinero provenientes del cobro de tasas aeroportuarias y seguros y de las partidas destinadas por el ministerio de Defensa.

"Habida cuenta de las gravísimas irregualidades enunciadas", argumentó el fiscal, "no puede descartarse la comisión del delito previsto y reprimido en el artículo 261 del Código Penal". Esa norma castiga con prisión de dos a 10 años al funcionario público que "sustrajere caudales o efectos cuya administración, percepción o custodia le haya sido confiada por razón de su cargo".

Sin embargo, la acusación central está basada en la figura prevista en el artículo 190 del mismo Código que penaliza a quienes pusieren en peligro la seguridad de una nave pudiendo provocar un "desastre aéreo".  Si como consecuencia de esa conducta se produjeren lesiones a las víctimas, la escala penal va desde los seis a los 15 años y en caso de muerte, de los 10 a los 25 años.

El cineasta y ex piloto aeromercial Piñeyro declaró hace dos semanas durante cuatro horas ante el fiscal y le entregó documentación para respaldar las denuncias de su película.

Rívolo ya había investigado hace seis años el accidente de un avión de la compañía LAPA que en agosto de 1999 causó la muerte a 65 personas, por el que acusó a empresarios y también a responsables del CRA, donde trabajan casi 6.000 personas. Piñeyro, ex piloto de esa aerolínea, atribuyó la tragedia a graves irregularidades y volcó sus denuncias sobre el accidente del avión de LAPA en "Wisky Romeo Zulú", su anterior película y ópera prima, de la que fue director y protagonista.