Una investigación por contrabando de teléfonos celulares de alta gama, que comenzó el año pasado a partir de un procedimiento de rutina realizado en el peaje del puente Zárate - Brazo Largo, destapó un negocio ilegal millonario que derivó en la detención de doce personas.
El juez federal de Campana Adrián González Charvay, a cargo de la investigación, ordenó en las últimas horas 41 allanamientos que fueron ejecutados por la Policía Federal Argentina (PFA) en la Ciudad de Buenos Aires, los partidos bonaerenses de Almirante Brown, La Matanza, San Vicente y Escobar, y en la localidad misionera de Puerto Iguazú.
Los investigadores descubrieron cómo era la ruta de ingreso de los productos electrónicos y los distintos puntos del país donde los comercializaban. "Los ingresos monetarios que generaban con esta maniobra eran millonarios", graficó uno de los voceros consultados.
En los operativos, la Policía secuestró cerca de 1.200 teléfonos celulares (25 de ellos marca Iphone) y miles de accesorios que ingresaron al país sin pagar los impuestos correspondientes. Además, incautaron un exclusivo auto Porsche Boxter, valuado en 67.500 dólares, que refleja el nivel de vida que llevaba uno de los supuestos contrabandistas.
Según pudieron establecer las pesquisas, la mercadería ingresaba a la Argentina desde Paraguay a través de pasos clandestinos ubicados en la provincia de Misiones. Desde allí, y por medio de distintos choferes, trasladaban los productos hasta la Ciudad de Buenos Aires, donde después los comercializaban en locales tanto de la capital como del Conurbano bonaerense.
En una camioneta utilitaria, que fue inspeccionada por la PFA, hallaron una gran cantidad de celulares y otros productos que estaban escondidos en el torpedo del vehículo, según se puede ver en un video que dio a conocer la fuerza.
La investigación comenzó el 23 de agosto de 2020. Y casi de casualidad. Fue en un operativo de rutina que ese día montó personal de Gendarmería en el Puente de Zárate - Brazo Largo que descubrieron noventa celulares de última generación, por un valor total estimado en 2.700.000 de pesos.
Los aparatos estaban ocultos en un cargamento de madera que trasladaba un camión que había salido de la provincia de Misiones y que tenía como destino la ciudad de Buenos Aires.
De acuerdo a los voceros, el conductor del rodado fue demorado pero la investigación no terminó allí. Con escuchas telefónicas y distintas tareas de seguimientos, identificaron los roles de los principales miembros de la organización. Doce de ellos fueron detenidos. Pero todavía hay tres sospechosos que permanecen prófugos.
CP