SOCIEDAD
abuelos modernos

El desafío de volver a la facultad después de cumplir los 60 años

Las universidades reciben cada vez más adultos mayores que quieren hacer una carrera. El PAMI dicta talleres y tiene 150 mil estudiantes.

Patio. Dina Fichendler (68) con sus apuntes de psicología, en el patio de la Universidad de Palermo.
| Marcelo Escayola

A sus 68 años, Dina Fichendler está a punto de recibirse de psicóloga. Le faltan cuatro finales que piensa rendir este año, y la tesis que hará el año que viene para cumplir con su asignatura pendiente. Con el apoyo de su familia, entre ellos sus nietos universitarios, se animó a probarse a sí misma, y a compartir el aula con jóvenes que rondan los veinte años. “Cuando empecé me di un año de prueba, para ver si las neuronas funcionaban y si la facultad me recibía bien, porque no sabia cómo iba a ser la convivencia con la gente joven”, cuenta Fichendler, que además es técnica en radiología y fisioterapia. “Pero la verdad es que estoy contenta y tengo buen promedio”, agrega.

Su caso es el de muchas personas de más de 60 años que vuelven a compartir aulas, grupos de estudio y hasta salidas con chicos que acaban de terminar el secundario. Y si bien en la Universidad de Palermo (UP), donde cursa Fichendler, no hay muchos estudiantes de su edad, ella rinde los exámenes con el mismo entusiasmo que el resto.

Desde el 2009 el programa Upami también da la posibilidad a los afiliados del PAMI para cursar talleres o carreras en universidades nacionales como la Universidad Nacional de La Plata, de Lanús, de Rosario y la UBA, entre otras. Más de 150 mil personas ya se anotaron a cursar talleres como Computación, Periodismo, Idiomas o Historia.

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Sentado entre sus compañeros, Héctor Di Tullio, ex diputado nacional de 66 años, cuenta que cursa Derecho en la Universidad Abierta Interamericana (UAI). Dice que tiene una relación “de primera” con todos y que cuando salen de cursar siempre se juntan en alguna casa. “Empecé a estudiar por sugerencia de mis nietos, que también están estudiando. Yo estoy jubilado, pero tengo ganas de seguir formándome, seguir aprendiendo, consciente de mis limitaciones”, cuenta. En la UAI hay 17 mayores de 60 haciendo alguna carrera, que van desde Educación Física, Odontología hasta Medicina. “No sé si es porque soy viejo, pero creo que hasta me tienen admiración”, se emociona.

En la Universidad Católica Argentina (UCA), en tanto, hay al menos ocho mayores de 60 cursando. Olga Zaffore es una de ellas, que está haciendo la Licenciatura en Historia. “Yo no paré de estudiar nunca”, dice, pero no revela su edad: “tengo más de 60 y menos de 65” cuenta, coqueta. Es, además, profesora nacional de música, y fue profesora titular del Teatro Colón, hasta que se jubiló. Aunque sigue dando clases. “Cuando me jubilé me dí cuenta que me sobraban horas en el día, y como no me puedo quedar quieta, decidí hacer la Licenciatura en Historia. Yo soy investigadora de carrera”, agrega.