El padre Ignacio Peries, cura sanador que recibe en Rosario a miles de personas todos los años, rezó en silencio en la zona donde se produjo la explosión del edificio en pleno de centro de la ciudad y bendijo a los rescatistas y a sus perros.
La hermana María Jordán, conocida por su asistencia humanitaria y religiosa en barrios carenciados de esta ciudad, estuvo en el Centro de Especialidades Médicas Ambulatorias de Rosario (CEMAR), para contener a los familiares de las personas fallecidas y de los desaparecidos por el derrumbe, publicó la agencia DyN.
Peries visitó a los familiares de heridos y personas que buscan a sus familiares en la sede del CEMAR, donde dio contención a las familias, según dijeron algunos allegados a los jóvenes buscados.