"Desde que estaba en el vientre de mamá que los zapatos ya formaban parte de mi vida. Cuando nací, mi papá ya tenía su propia fábrica y se dedicaba al diseño, producción, fabricación y venta de zapatos. Cuando terminé el secundario, y mientras cursaba la carrera de diseño gráfico, empecé a trabajar en la fábrica con mi papá, tenía 17 años. Me enseño el proceso de fabricación de un zapato desde la idea, como plasmarlo en un molde hasta los pasos de la producción", cuenta Natalia Tenuta, hija del mítico Carmelo Tenuta que con sus zapatos de Lonté abrigó y engalanó los pies de las grandes figuras de la Argentina.
En 2002, Natalia decidió abrirse camino y cultivar su propio estilo lanzando Lonte XXI, su propia marca con un local en Palermo, siempre guiada por su padre a quien llama “mi gran maestro”.