Iara Nerea Reynoso, uuna argentina de 30 años que se había radicado , fue encontrada muerta en su casa en Brasil, sobre la cama, con sangre en la boca. La mujer era oriunda de Mar del Plata y hacía menos de un año se había mudado a Pipa, una localidad de Río Grande del Norte.
La policía está avanzando en determinar si se trató de un asesinato o una intoxicación y en ese sentido investigan también a un hombre que la acompañó a una fiesta en un barco la misma noche de su fallecimiento.
Iara fue encontrada por dos amigos que decidieron trasladarla de urgencia a una salita de salud cercana en tibau do Sol, pero ya era demasiado tarde y no hubo posibilidad de reanimarla. “Ella supuestamente estaba desmayada pero en la salita donde la recibieron dictaminaron que ya había fallecido”, contó Ezequiel, una amigo de Iara, al sitio 0223.com.
El hombre que había acompañado a Iara a la fiesta, de la cual se retiraron juntos, se presentó en la casa de la mujer el viernes por la mañana sin palabras para explicar lo que había sucedido. “Nadie sabe nada y el flaco que estaba con ella tampoco sabe decir nada de la muerte”, detalló Ezequiel.
Este amigo se contactó con la Embajada argentina en Brasil y aseguró que su amiga “no era de consumir ningún tipo de sustancias ni drogas duras ni nada”.
La familia de Iara emprendió viaje hacia Pipa ni bien se enteró de lo ocurrido. El cuerpo de la mujer será sometido a un estudio forense para determinar si hubo terceros involucrados en su muerte y si había consumido sustancias tóxicas.
La tercera mujer argentina muerta en el exterior
Esta semana se conoció la muerte de dos argentinas en un accidente vial en Punta Cana. Valeria Paola Medina, de 44 años y Valeria Victoria Brovelli, de 33, perdieron la vida cuando volcó un micro que transportaba turistas.
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Valeria Brovelli falleció en el acto y Valeria Medina perdió un brazo en el accidente y fue llevada de urgencia al Hospital IMG, donde recibió asistencia e intervenciones quirúrgicas. Sin embargo, falleció este viernes, y se convirtió así en la segunda víctima argentina de la colisión.
El accidente mortal ocurrió en la localidad de Bávaro, provincia de La Altagracia, y el contingente de turistas incluía además de argentinos y peruanos, turistas provenientes de Brasil y Chile.