Llegó a paso lento dispuesto a jugar una buena cantidad de dinero. En el casino del hotel Conrad lo esperaban en el salón reservado para jugadores vip, el Club Conrad, que cuenta con 25 mesas para los clientes más exclusivos. Franco Macri (81) eligió una de las ruletas y se acomodó junto a sus acompañantes: un nutrido grupo de amigos, su ex pareja y actual mano derecha en los negocios, Nuria Quintela, su hija Florencia Macri junto a su novio Facundo Pellegrino y su hijo Nicolás Palacios.
Fue hace dos semanas y todo parecía encaminarse para una noche perfecta. El jefe del clan Macri, con un inseparable vaso de whisky, apostó fuerte durante largas horas sin intimidarse, repartió algunas fichas a sus acompañantes y decidió marcharse cuando los bolsillos se le llenaron: en una sola noche ganó 180.000 dólares. Pero no fue la única vez que tuvo suerte. Antes había ganado otras tres veces en diferentes días una suma total que rondaba los 120.000 dólares, según cuentan quienes lo vieron apostar. En total, Macri le sacó al casino 300.000 dólares en pocos días. “Tiene una suerte increíble este verano. No se puede creer lo que ganó”, se sorprendieron quienes lo conocen.
Fiesta. Nuria Quintela no lo podía creer. Florencia Macri tampoco. Con su andar lento y los parpados caídos, el “pater familia” parecía inmutable ante la victoria. Había que festejar. Nuria tomó la posta y alentó al grupo para terminar de brindar en Tequila, el boliche más exclusivo de Punta del Este. Franco aceptó la propuesta y se fue contento a celebrar.