El sacerdote Julio Cesar Grassi, imputado por supuesto abuso y corrupción de menores, rechazó hoy ante la Justicia de Morón la nueva acusación de otro joven que perteneció a su fundación y que aseguró que él también había sido víctima de delitos sexuales.
Durante más de diez horas, ante la jueza penal de Morón Mónica López Osornio, Grassi rechazó en su indagatoria las imputaciones que hizo en su contra un joven de 23 años y que originaron la apertura de esta nueva investigación.
El sacerdote, además de proclamar su inocencia a la salida del tribunal, aseguró que el nuevo denunciante habría sido extorsionado para dar ese testimonio. "Yo presenté elementos a la Justicia para que esto se investigue", dijo Grassi ante los periodistas, al retirarse esta noche de los tribunales de Morón.
El joven denunciante, que asistía a la fundación Felices Los Niños, había negado ante la Justicia de Santa Cruz haber sido víctima de presuntos abusos sexuales por parte del cura, tal como lo había dicho uno de sus compañeros. Pero luego se presentó ante la Justicia para decir que sí había sido víctima de esas intimidaciones por parte de Grassi, aunque sólo en jurisdicción de la provincia de Buenos Aires.
El cura se dedicó en la indagatoria a desmentir al joven que lo acusó y afirmó que el chico habría intentado extorsionarlo antes de hacer esta denuncia ante la justicia de Morón, según indicaron a DyN fuentes judiciales.
También le dijo al fiscal Matías Rapazzo, que había solicitado su citación, que no había elementos para acusarlo y entregó un video para que se investigue si el joven pudo haber sido extorsionado para declarar en su contra.
La audiencia, que empezó a las 9 en los tribunales de Morón y se prolongó más de diez horas, fue ordenada por la jueza López Osornio, la misma que decidió en 2002 otorgarle esta libertad morigerada luego de procesarlo por los supuestos abusos de "Gabriel" y "Ezequiel", por los que ahora espera el postergado juicio oral.
Esta mañana Grassi se presentó en la audiencia acompañado por sus nuevos abogados, Ricardo Malvicini y Daniel Cabo, quienes se hicieron cargo de la defensa del sacerdote, luego de que los representantes legales que tuvo hasta ahora decidieran renunciar después de que la Cámara Penal de Morón apartara al tribunal oral que iba a hacer el juicio por supuesto prejuzgamiento.
Precisamente, aquel tribunal fue separado porque habría adelantado opinión sobre una pericia psiquiatrita hecha al cura en la provincia de Santa Cruz, que no estaba incorporada a la causa de Morón.
La causa de Santa Cruz se abrió precisamente para investigar si Grassi pudo haber cometido un abuso contra uno de los menores durante un viaje al Calafate que hizo la Fundación, y el señalado de esos supuestos abusos era "Luciano", quien negó allí esos ataques.
Sin embargo, en julio pasado, el joven se presentó en la Fiscalía de Morón y, con su verdadera identidad, aseguró que tres o cuatro meses después de aquel viaje a Calafate Grassi se habría acercado a él para acariciarlo y besarlo, situación que se habría repetido posteriormente, según consta en la declaración.
Abuso sexual agravado. A Rapazzo, en su dictamen del 9 de octubre consideró acreditados el abuso sexual agravado y uno de corrupción agravada por su condición de guardador y sacerdote, todos ellos en perjuicio de Gutiérrez.
El 4 de octubre último, la jueza de Garantías 1 de Morón, Mónica López Osornio, aceptó como querellante al abogado Juan Pablo Gallego, en representación del Comité Argentino de Derechos del Niño (CASACIDN), que es presidido por la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto.
Gallego invocó en su solicitud las normas de un Tratado Internacional sobre Derechos del Niño suscripto por la Argentina, cuyo incumplimiento podría acarrear responsabilidad al Estado Argentino.
No es el primer caso. Estos nuevos 11 hechos se suman ahora a los seis ya existentes, en perjuicio de los jóvenes conocidos como "Gabriel" y "Ezequiel", por los cuales Grassi ya fue remitido a juicio oral.
Ese debate debió comenzar el 4 de julio pasado, pero días antes el Tribunal Oral Criminal 4 de Morón fue apartado de la causa, recusado por haber emitido y anticipado opinión favorable al acusado.
El Tribunal Oral 1 de Morón fue elegido por sorteo y deberá fijar la fecha para el debate, en el que se juzgarán los seis hechos anteriores.
Grassi acumula una tercera causa, en Santa Cruz, ante el Juzgado Universal de Calafate, a cargo de Carlos Navarte, por abuso y corrupción, también en perjuicio del entonces adolescente Luis Gutiérrez, con quien había viajado en una misión de la "Fundación Felices Los Niños" a esa provincia.