La investigación judicial por los contagios de Covid-19 producidos en el geriátrico Carpe Diem, ubicado en el barrio porteño de Recoleta, quedó a cargo de la Justicia Federal. El caso se conoció este jueves y ya hay 37 contagios confirmados, entre pacientes y empleados.
La decisión de que la investigación quedara bajo la órbita de la justicia Federal y no de la Ciudad, como sucedió en otros episodios similares, radica en que en esta oportunidad se investiga la posible violación del artículo 205 del Código Penal. La disposición implica que será reprimido con prisión de seis meses a dos años, quienes violaren las medidas adoptadas por las autoridades competentes, para impedir la introducción o propagación de una epidemia. La causa recayó en el juzgado federal de Daniel Rafecas, desde dónde fue delegada a la fiscalía a cargo de Federico Delgado, quien a partir de ahora llevará adelante la investigación.
En casos anteriores en los que resultaron involucrados geriátricos en el contagio de pacientes, como sucedió en el Apart Incas, de Belgrano, la investigación quedó en la justicia de Ciudad, porque allí lo que se investiga es el posible delito de abandono de personas, que es competencia de ese fuero.
La residencia geriátrica Carpe Diem, ubicada en Paraguay al 2400, se convirtió en noticia luego de que se conociera que 30 adultos mayores debieron ser enviados a distintos hospitales tras haber dado positivo en los testeos de coronavirus. El traslado de los pacientes, de los cuales quienes tienen obras sociales fueron derivados a establecimientos privados, y los que tienen PAMI a entidades públicas, estuvo en manos del titular del SAME, Alberto Crescenti. El operativo que duró varias horas, e incluyó también un fuerte operativo policial en la zona. Europa: más del 50% de las víctimas de coronavirus vivían en geriátricos.
En el anochecer del jueves, en medio de la situación, habló Blas Rimmaudo, uno de los responsables de Carpe Diem. “Acá se cumplieron todos los protocolos, se trata de todos casos asintomáticos, habíamos hecho estudios que primero dieron negativos, y los nuevos estudios encontraron esta situación, cuando descubrimos que había casos positivos dimos el aviso como corresponde”, sostuvo.
“Hemos tomado medidas por encima de los protocolos que exige la Ciudad de Buenos Aires”, aseguró Alejandro Paolasso, jefe médico de la institución. “Por protocolo, teníamos que esperar tres días luego del caso sospechoso inicial para hacer estudios a todos, y los hicimos el primer día, incluso cuando todos eran asintomáticos. Se dio aviso inmediato a las autoridades, y seguramente van a quedar aquí los internados que dieron negativo”, agregó.