Según un informe de la Defensoría del Pueblo de la Nación, se venden en droguerías y farmacias remedios robados, vencidos, adulterados y con la fecha de vencimiento tapada o cambiada.
El informe hace nombra a varias farmacias que estaban en falta. En la farmacia Catedral II de la ciudad de Salta se hallaron jarabes que habían sido denunciados como robados. La droguería Del Sol –que funciona en Rosario- mintió sobre el origen de una serie de tiras reactivas utilizadas por personas con diabetes. La Ciudad de Buenos Aires tampoco fue ajena a las irregularidades. En una farmacia ubicada en Avenida Rivadavia al 4900, se vendían medicamentos para el VIH que en realidad forman parte del programa de medicamentos gratuitos del Ministerio de Salud.
Para detectar más irregularidades y normalizar el comercio de medicamentos, la Defensoría considera que se debe regular más exhaustivamente las distintas etapas de comercialización, desde que el medicamento es elaborado hasta que es adquirido por el consumidor.
Sin embargo, Eduardo Mondino, el defensor del Pueblo, consideró –en declaraciones hechas al diario Clarín- que "la autoridad sanitaria tiene una capacidad muy limitada y el control insuficiente hace que la gente pueda estar consumiendo medicamentos vencidos o de calidad inadecuada, o medicamentos que no hacen nada. Por lo cual se demora el acceso a un tratamiento efectivo para las enfermedades".
Para Mondino el eje debe estar puesto, entonces, en el fortalecimiento de la Administración Nacional de Medicamentos y Tecnología Médica (ANMAT), que "hoy cuenta con una capacidad insuficiente para que el Estado argentino garantice la trazabilidad de los medicamentos para asegurar su calidad a los consumidores.
Lo cierto es que la ANMAT cuenta con sólo 12 inspectores que necesitan para actuar la autorización de los gobiernos provinciales. Aún así, las irregularidades que presenta el informe de la Defensoría fueron detectados por esa institución.
Mondino reclamó, además, la puesta en marcha de una base de datos única con los establecimientos en los que se comercializan medicamentos y la regulación de la medicación que entregan las obras sociales y empresas de medicina prepaga y las muestras gratis que facilitan los médicos.
La defensoría del pueblo denuncia venta de remedios vencidos y con otras irregularidades
Hallaron medicamentos adulterados, robados y falsificados. La dependencia del Estado que debe encargarse de controlar lo que ocurre en todo el país cuenta sólo con 12 inspectores.
