Pero antes de partir se desató un escándalo. Su padre, Javier Bustos Fierro, protagonizó el fin de semana pasado un confuso episodio con una stripper, Johana Zulé, en el club Tiffany en Villa Carlos Paz. Nunca se imaginó las consecuencias de su vida nocturna: Bustos Fierro y Zulé terminaron en la Comisaría 10ª del Barrio Güemes de esa ciudad. Bustos Fierro radicó una denuncia por robo de su celular, aunque luego trascendió que fue detenido porque la policía lo vio discutir fuertemente en su automóvil con Zulé.
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Luego Bustos Fierro admitió que llevaba a la stripper desde Villa Carlos Paz hasta la ciudad de Córdoba, aunque “no tenía relación alguna con ella”.
Sin embargo, Johana Zulé reveló que conoció a Javier en un boliche, y tuvieron sexo. También declaró que el hombre gastó dinero en distintos boliches y en un lujoso hotel alojamiento.
“Le pregunté si era la plata de las donaciones y me dijo que no me meta, que eso era plata de los giles”, señala la joven, que tiene 23 años y es madre soltera.
