SOCIEDAD
Tiempos pandémicos

La cruda historia de una mamá y su hija discriminadas por tener Covid-19

“¿En qué nos hemos convertido?” se preguntó la mujer que debió insistir en una clínica para que atendieran a su hija que se había fisurado la córnea.

Mariana Volpi
Mariana Volpi | Facebook

Mariana Volpi contó que a su hija que tenía Covid-19 se le partió un lente de contacto en el ojo por lo que tuvieron que ir de urgencia a una clínica. La joven se quedó afuera mientras su madre le contaba a la recepcionista lo que había sucedido y que necesitaban atención inmediata. Sin embargo, cuando dijo la palabra coronavirus la respuesta que recibió por parte de la secretaria, las enfermeras y la gente que estaba en la sala de espera fue unánime: “¡Vaya a su casa!”

Ante esta situación Volpi eligió contar su experiencia en Twitter para generar consciencia sobre la “deshumanización del sistema de salud”. “¿En qué nos hemos convertido?”, se preguntó. “Mi hija tiene covid. Esta aislada hace 9 días. Hoy tuvo un accidente en un ojo. La llevo a una clínica de ojos. Ella se queda en la vereda esperando. Entro (yo tengo 2 pcr negativos) y les digo que mi hija es covid positivo y que tuvo un accidente”, comienza el relato.

“La piba de recepción se para nerviosa y se va. Vuelve y me dice: no la podemos atender y usted tiene que retirarse porque es contacto estrecho. La gente que estaba esperando para ser atendida comienza a decirme: ¡váyase! en particular una señora con el barbijo sin tapar la nariz, me dice que piense en ellos y que nos vayamos”, continúa.

Ante este escenario la mujer insiste en que su hija tuvo un accidente, que está respetando el protocolo y que por eso estaba esperando afuera, pero le seguían diciendo que volviera a su casa y que pidiera una ambulancia. Como Volpi es abogada, usó las herramientas de su profesión para explicar que su hija tenía el derecho a ser atendida.

“Mi hija lloraba en la vereda y me gritaba de afuera ‘¡vamos ma!’ angustiada, avergonzada. La leprosa. Una sensación muy fea. Dolorosa”, relató. Finalmente un médico, con los cuidados necesarios, atendió a la joven que tenía una fisura en la córnea.

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Volpi contó que decidió comunicar lo que vivió sin mencionar a la clínica, porque ella evalúa que es una situación generalizada y que es necesario mejorar el diálogo entre las personas. “Hay posibilidad de ejercer derechos, si aprendemos a expresarnos y aprendemos a escuchar vamos a poder evitar que todo se siga yendo al carajo, hay mucha responsabilidad personal en toda esta situación de maltrato”, subrayó la mujer en diálogo con Ernesto Tenembaum en Radio con vos

“Esto es por nosotras y es por todos, para entender que dialogando se puede acceder a derechos”, insistió y agregó: “Mi hija tenía una fisura en la córnea, pero me quedé pensando en cuántas personas se deben ir a su casa por no animarse a reclamar”.
 

RB/FL