Operativo retorno en PRO, fase dos: "GABRIELA, VEN A MÍ". Por estar expuesta casi tanto como las figuras que componen la colorida y variopinta farándula nacional, la otra farándula, la política, con su también amplia paleta de personajes, muchas veces tiene comportamientos que parecen más propios de la primera fauna que de la segunda. Esta última, por ejemplo, ha sabido acostumbrarse a que los rencores de ayer pueden transformarse en los abrazos de hoy... ¡y aquí no ha pasado nada! La semana pasada comenzó el “operativo retorno” (a Mauricio Macri) de Gabriela Michetti, quien parece haber sentido que la provincia de Buenos Aires no era la geografía a conquistar en las próximas elecciones. Y el “no” de Gabriela puso limón a viejas heridas internas del PRO. Sin embargo, muchas de las miradas se enfocan a ver cómo reacciona Horacio Rodríguez Larreta, que –si no se quiere sindicarlo como el enemigo– sí es el menos afecto a tener cerca a la mediática diputada. Por toda esta situación, el cumpleaños número 47 de Emilio Monzó, que se celebró esta semana en su amplio piso de Palermo Chico, tuvo un tema más interesante para cotillear que al que siempre los tiene acostumbrados y “más unidos que separados”: el Gobierno nacional. Cuando todos daban por descontado que con su presencia Gabriela Michetti rivalizaría en protagonismo con el cumpleañero, ella no se presentó y dicen que se debió a que, casualmente o sincrónicamente, ella cenaba con su jefe y líder, Macri, quien tampoco pasó por lo de Monzó, en el coqueto piso que habita desde hace menos de un año frente a Plaza Alemania. A pesar de estas ausencias, el abundante catering alimentó y contentó a los invitados. Entre ellos, María Eugenia Vidal y su marido Ramiro Tagliaferro, los ministros Guillermo Montenegro, Carolina Stanley y Miguel De Godoy, los subsecretarios de Monzó, Nicolás Ducote, Augusto Rodríguez Larreta y Marcelo Daletto, Fabián Perechodnik, el actor y padrino de bodas de Macri y Juliana Awada, Martín Seefeld, Jorge Asís, Nancy Pazos –sin Diego Santilli–, y el controvertido personaje del PRO Nicolás Caputo. Esa noche se quedaron con las ganas aquellos que querían ver cómo sería ese encuentro entre Larreta y Michetti y ver qué semblante ponía cada uno en caso de tratarse la vuelta de ella a la mesa chica de Macri.
Fichas y sorpresas. Fuera de la gente netamente macrista, entre los presentes estuvo una cara que de a poco va incorporándose a este grupete, José Scioli, quien rompió el hielo con un papel en la mano asegurando que eran fichas de afiliación al partido de Francisco De Narváez, Unión Celeste y Blanco. Después de las bromas, el hombre de confianza del Colorado cumplió la misión: seguir en su campaña para convencer a los del PRO de “llegar unidos a la próxima elección” y se mostró confiado en poder ganar los comicios. Incluso aprovechó para repasar las últimas encuestas, en las que, según él, su jefe quedó posicionado como el único opositor en el territorio bonaerense. También hubo quien aportó otra encuesta cuyo origen quedó para pocos, que insistió de convencer a Michetti de que acepte disputar en la provincia porque, según quien hablaba, medía bien. En cambio, en la Ciudad no se la percibe con una imagen con la energía suficiente para ser opositora al Gobierno, como sí resulta ser Macri. Fuera de esta charla, que no dominó el festejo, sí hubo una sorpresa y fue la presencia de dirigentes randazzistas “puros”, adjetivo que ya se usa tanto como “ultra”. Al final de la noche llegaron el secretario de Interior de la Nación, Marcio Barbosa y el intendente de Chivilcoy, Aníbal Pittelli. En tiempos tan sensibles como los actuales, cuando parecen abundar esas fronteras de cristal que separan a propios, ajenos y entenados, se ha vuelto normal que se tenga que justificar una presencia de diferente filiación partidaria en territorio ajeno. Por eso, la aparición de Barbosa, se dijo, se debió a su amistad con el cumpleañero. La del intendente quedó sin explicación, por lo que varios le auguraron posibles retos.
Otoño en Nueva York. El que disfrutó con entusiasmo el lomo con papas en la sede de la Americas Society fue José Luis Manzano. No era para menos, en vistas del lugar destacado en la mesa principal que el mendocino consiguió para escuchar a Miguel Galuccio junto a otros treinta empresarios. Eduardo Eurnekian y Carlos Bulgheroni, en tanto, flanqueaban a la anfitriona Susan Segal. En el edificio de Park Avenue y 68 estaban también Sergio Urribarri, Facundo Gómez Minujín, Walt Maguire (Chevron), Jorge Argüello, Bernardo Kliksberg y una hiperkinética Doris Capurro.
Política y canguros. Para algunos diputados, la semana política no pasó por Nueva York sino por Australia. Fue el caso de las legisladoras Paula Bertol (Pro), Margarita Stolbizer (GEN) y Natalia Gambaro (PJ) y del kirchnerista Pablo Kosiner, que viajaron hasta el otro lado del mundo para participar en un programa de becas de la Universidad Tecnológica de Queensland. Superadas las dificultades para conseguir algunos dólares en Argentina, los integrantes de la Cámara baja desembarcaron en Canberra, donde visitaron el Parlamento y mantuvieron un almuerzo con el embajador argentino, Pedro Villagra, que todavía seguía entusiasmado con el reciente paso de Los Pumas por ese país. Los visitantes se sorprendieron por la inmensa población asiática en Australia, y también por el nivel de la industria vitivinícola local; el Sauvignon Blanc fue muy elogiado por quienes pudieron catarlo a orillas del río Brisbane. Y como ningún viaje a Oceanía estaría completo sin ver algún koala o un canguro, los sudamericanos agradecieron que la cargada agenda diseñada por los anfitriones incluyera una pintoresca visita a una reserva de estos simpáticos marsupiales.
Mover la dama. Mientras las negativas de Gabriela Michetti a jugar en la provincia de Buenos Aires parecen encaminadas a arruinar los planes legislativos del macrismo para 2013, en otro espacio opositor también están pensando en mover una de sus damas. Algunos referentes del Frente Amplio Progresista, alentados por los resultados de encuestas recientes, ven con buenos ojos la posibilidad de que Victoria Donda, diputada de alta exposición de ese espacio, pelee por una de las bancas de la Ciudad en la Cámara de Senadores.
Sin tiempo de relax. Es motivo de comentarios en el Spa Colmegna la ausencia desde hace más de un mes de uno de sus clientes más notorios y polémicos. El juez federal Norberto Oyarbide –deprimido por los recientes escraches de vecinos frente a su domicilio en Recoleta– ha dejado de frecuentar el reducto del microcentro porteño y no recibe ya sus tratamientos capilares y sus habituales baños de vapor. No obstante, otra presencia estelar ha sabido ocupar el espacio dejado por el magistrado. Diego Armando Maradona ha empezado a frecuentar Colmegna y pasa largas tardes de descanso y relax junto a uno de sus custodios.
Quema esas fotos. El titular de la Suprema Corte de Justicia bonaerense, Néstor De Lazzari, se mostró molesto por la difusión que hizo Daniel Scioli de su presencia en un acto protocolar. Sucede que el día anterior, los legisladores del bloque del FpV-PJ le habían entregado al magistrado el informe sobre la causa por el crimen de Candela, en el que le piden al gobernador bonaerense la exoneración del jefe de la Policía provincial, Hugo Matzkin, por lo que De Lazzari pretendía quedar al margen de esta disputa. Según contaron allegados al magistrado, el titular de la Suprema Corte fue a la inauguración del nuevo edificio de la Defensoría Oficial y cuando llegó se dio cuenta de que el gobernador había utilizado la foto para mostrar a De Lazzari de su lado en la disputa con el ultrakirchnerismo. Esto generó el enojo del magistrado, quien buscó mantenerse lejos de la foto, sin conseguirlo.
No voy en tren. El manejo del transporte nacional, algo que parecía un reconocimiento presidencial a su labor y una nueva acumulación de poder dentro del gabinete, se está convirtiendo en una pesadilla para el ministro Florencio “Heladero” Randazzo. Dan fe algunos de los presentes en la reunión del jueves pasado en la Casa Rosada en la que se anunciaron, por enésima vez, obras en las estaciones del Ferrocarril Sarmiento. Uno de los intendentes bonaerenses que se encontraban en el lugar, cansado de las convocatorias, reflejó su malestar: “Hoy nos llamaron para anunciar que nos dan el manejo de los puestitos de las estaciones, que quieren que nos pongamos a vender choripanes y caramelos”. Igualmente, se compadecían de Randazzo, porque lo peor para el titular de la cartera está por venir: antes de fin de año deberá anunciar la eliminación de subsidios y el consecuente aumento de tarifas para millones de pasajeros.
Los une el espanto. Los de “siempre” en el área de comunicación del gobernador bonaerense, Daniel Scioli, están atravesando un momento muy particular, y todo, desde que reapareció en la función pública el hombre calvo y ahora fanático de los corbatines. Se sienten dolidos, y planean venganza. Los de “siempre” hasta limaron sus diferencias internas históricas, y no es para menos: el ascendente enemigo común los une. En consecuencia, están pensando seriamente en reflotar unas viejas declaraciones del “afrancesado” dirigente, al parecer no muy consideradas para con su nuevo jefe político.
De Moreno a Vietnam. No son muchos los que querrían encontrarse cara a cara con Guillermo Moreno en estos días de alta exposición del secretario de Comercio. Pero el que vería con buenos ojos un llamado desde sus oficinas es el embajador de Vietnam, Nguyen Van Dao. Es que en la casa diplomática están muy entusiasmados con el viaje que realizarán un grupo de empresarios argentinos a ese país a fines de octubre. De esto hablaba en la zona de embarque del Aeropuerto de Ezeiza el titular de la Ucedé, Jorge Pereyra de Olazábal, quien contaba, para asombro de sus interlocutores, que había mantenido precisamente un encuentro pocas horas antes con el propio Moreno en su despacho en la Secretaría. “Es un hombre con convicciones y con temperamento firme, y creo que todos tienen derecho a pensar diferente”, lo describió, minutos antes de embarcar hacia Hanoi, donde permanecerá, en calidad de presidente de la Cámara de Comercio Argentino-Vietnamita, hasta el arribo a suelo asiático del contingente nacional dentro de un mes.
Máximo, en red. A su manera, el heredero más poderoso del kirchnerismo se vale de las posibilidades que brindan las redes sociales para sondear el terreno electoral. El hijo presidencial y líder de La Cámpora, Máximo Kirchner, consiguió algunos adeptos a una posible candidatura suya para el próximo año. En Facebook ya existe un perfil bajo el nombre “Máximo Kirchner diputado 2013”, que cuenta con más de 150 miembros. Entre las adhesiones figuran varias páginas camporistas, como la de las representantes de la agrupación juvenil de distritos tan variados como Corrientes, Ensenada, San Fernando, Moreno, Florencio Varela, la Comuna 15 y La Paternal.