Cesó esta madrugada la caída de cenizas volcánicas en la ciudad rionegrina y en la región. Sin embargo, el estado de emergencia dispuesto por el intendente de San Carlos de Bariloche, Marcelo Cascón, sigue vigente tras la erupción del complejo volcánico Puyehue-Cordón Caulle.
Cascón señaló hoy que una llovizna aplacó la presencia de cenizas volcánica en la ciudad, ubicada a 100 km al este del volcán Puyehue, aunque recordó que rige "el estado de alerta" ante la posibilidad de que se repita el fenómeno por la actividad del volcán chileno.
En este marco, el aeropuerto de la ciudad permanecerá cerrado hasta que cese el alerta por lluvia de cenizas y una junta de Defensa Civil y autoridades municipales evaluará si se suspenden las clases mañana y las actividades públicas en la ciudad.
Cascón indicó esta mañana que hay "una leve llovizna que nos ayuda a evitar el vuelo de ceniza", por lo que se iniciaron las "tareas de limpieza en bebederos de agua, alcantarillas y la vía pública". Además, explicó que el fenómeno no causó daños sobre servicio públicos y que "hay abastecimiento de todo lo que tiene que ver con materia alimenticia y agua mineral".
Por otra parte, detalló que durante la noche se registraron algunos casos de pacientes que ingresaron a centros médicos a causa de la lluvia de cenizas, aunque aseguró que "no ha habido grandes concurrente a hospitales", cuyas guardias fueron reforzadas durante la noche.
En diálogo con Perfil.com, Renato Ponce, director de Defensa Civil a nivel provincial, aseguró que la situación "es de tranquilidad". "Ahora no tenemos precipitación de ceniza y estamos en contacto directo con las autoridades chilenas", agregó el funcionario desde la Subsecretaría de Medio Ambiente barilochense.
"Estamos haciendo limpieza dado que se alcanzaron los 3 centímetros de ceniza acumulada. Pero hay que estar atentos porque el volcán sigue expulsando vapor con partículas de ceniza. Una de nuestra preocupaciones fueron los vecinos en zonas rurales, quienes toman agua de pozos a cielo abierto a quienes ya les distribuimos agua potable envasada", añadió Ponce.
Perfil.com se comunicó con un habitante de la localidad de Río Chico, ubicada al sur de Río Negro. Edgardo Miguel comentó la nube todavía no desapareció por completo, por lo que en plena mañana "aún está de noche". "Tenemos agua potable y todo está tranquilo, el problema es que acá no hay señal de celular y el teléfono de línea suele colapsar cuando varios vecinos llamamos al tiempo para avisar que nos encontramos bien", remarcó Miguel.
Por su parte, Fabio Baccaglioni, bloguero y actual visitante de la ciudad turística, describió que "la nube apareció muy rápido, avanzó unos 20 km en 10 minutos". "No se entendía bien si era una tormenta o qué, porque no hubo avisos o advertencias sobre la erupción. Recién nos dimos cuenta cuando comenzó a caer la ceniza".
"Los barilochenses están esperando que no cambie el viento, porque de ser así, vuelve a llover ceniza. Si bien en las casas se podía respirar bien, al salir a la calle se complicaba muchísimo" apuntó Baccaglioni y luego detallo: "La ceniza es una arena fina que puede llegar a molestar en todo sentido. Por eso aún no el aeropuerto está cerrado. Mi vuelo está suspendido".
El volcán Puyehue, de 2240 metros de altitud, se encuentra en el complejo volcánico del cordón Caulle, en la cordillera de Los Andes, y su última gran erupción fue en 1960, tras un terremoto de 9,5 grados Richter en Valdivia. En este fin de semana, provocó una columna de humo de más de 15 kilómetros.