Este miércoles 23 de noviembre, los Metrodelegados volverán a reclamar por la reducción de la semana laboral y el cambio de trenes con asbesto. La medida de fuerza afectará a la línea C, con apertura de molinetes y paro de una hora.
Tal como viene sucediendo desde hace varias semanas, el sindicato anunció con un día de anticipación que se llevaría a cabo esta protesta en un comunicado en el que además pidieron disculpas a los usuarios que se verían afectados.
Días atrás habían advertido que podría existir la "posibilidad de la paralización por tiempo indeterminado del servicio" de este ramal en caso de no llegar a un acuerdo con la empresa Emova, que es la que tiene la conceción de este transporte público.
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El secretario del gremio, Roberto Pianelli, y el adjunto, Néstor Segovia, pusieron su firma en el comunicado que confirma que la medida de fuerza consistirá en liberar los molinetes de 13 a 14 horas en la estación Constitución, mientras que de 14:00 a 15:00 habrá un cese total de actividades.
Los Metrodelegados aseguran que nunca recibieron respuesta por parte de Emova a sus reclamos y es por eso que llevan adelante este nuevo paro. "Como consecuencia, continuaremos con las medidas de autodefensa. Recordamos que el asbesto es un mineral cancerígeno, y que en la actualidad tenemos 75 compañeros con afecciones causadas por exposición a este mineral, y lamentablemente 3 compañeros fallecidos por enfermedades provocadas por el amianto. Para los trabajadores, reducir la jornada semanal significaría reducir la exposición a este cancerígeno y ganar en salud", sostuvieron.
La respuesta de Emova
Por otra parte, Emova desmiente que no hubo una respuesta y confirma que "en reiteradas oportunidades, ya le hemos informado que resulta inviable su reclamo de reducir la jornada laboral del personal del Subte agregando un franco semanal al actualmente existente. El incremento en la cantidad de francos manteniendo la actual jornada diaria de 6 horas implica una disminución de la jornada semanal de 36 a 30hs semanales, que resulta incompatible con una operación adecuada del servicio y por debajo de niveles razonables de productividad"
Y sumó la empresa: "La jornada actual de 6 horas diarias incluye un tiempo de refrigerio y descanso, por lo que en realidad el tiempo efectivo de trabajo es aún menor, con casos como el área de Tráfico (conductores y guardas) en que la jornada oscila entre 4 horas y media y 5hs de operación efectiva".
"NO es cierto que falte personal para cumplir con las tareas exigidas en el contrato que regula la concesión de Emova, ya que los resultados cumplen los parámetros de calidad requeridos y además se han introducido innovaciones técnicas y operativas que permiten seguir avanzando en un proceso de mejora sostenida", añadió Emova.
Por último, la compañía enfatizó en que sigue abierta al diálogo para "evitar cualquier medida de fuerza que afecte el servicio y que perjudica a los más de 900 mil usuarios que cada día eligen la Red de Subte para trasladarse por la Ciudad de Buenos Aires, especialmente a aquellos que necesitan de este transporte público para llegar a sus lugares de trabajo".
JP/fl
