Quizá sea el cansancio, el calor, las dificultades o todo eso junto. Pero lo cierto es que hay una sensación de necesitar juntarse con seres queridos para pasar las Fiestas. Según un estudio de Offerwise-Facebook IQ, el 69% de los argentinos planea, Covid-19 mediante, celebrar Navidad con cenas presenciales en familia. Sin embargo, hay algunos hábitos que se modificaron: el 51% planea hacerlo con un número reducido de personas y el 23% declaró que las cenas serán vía videoconferencia.
Lo cierto es que evitar juntarse parece ser una misión imposible. Por ello, para minimizar las posibilidades de convertirse en transmisores involuntarios, el Ministerio de Salud de la Nación y la Sociedad Argentina de Pediatría armaron sendos instructivos para cuidarse.
Primero, recomiendan que, si hay personas de riesgo entre los comensales, el autoaislamiento es obligatorio, y debía comenzarse el martes 15.
También se recomienda que las reuniones se realicen al aire libre, en patios, terrazas, veredas; siempre garantizando que se cumpla con el distanciamiento físico pertinente –un metro y medio– para minimizar el contacto entre los asistentes.
De no ser posible al aire libre, abrir puertas y ventanas para asegurar buena ventilación.
Limitar el número de asistentes en cada reunión también es clave, según los especialistas. “Es preferible que las reuniones sean con convivientes o grupo habitual de contacto (burbuja); en el caso de que haya algún miembro diferente a los contactos habituales, limitar el número de personas o grupos a lo mínimo posible”, dicen los expertos de Salud.
En la distribución de las personas en la mesa, cena o brindis, se recomienda que aquellos convivientes o contactos habituales se ubiquen juntos y sin mezclar con otros grupos. Otra clave es no compartir vasos, cubiertos ni utensilios. No tomar de la misma botella o lata es la otra premisa fundamental.
Y, aunque parezca que ya se dijo hasta el cansancio, se recomienda cumplir en todo momento con las medidas de distanciamiento, uso del barbijo o tapabocas la mayor parte del tiempo y la higiene de manos.
Si alguna persona tiene síntomas o diagnóstico de Covid-19, o es contacto de un caso confirmado, debe permanecer en aislamiento y –por lo tanto, y aunque genere molestias o enojos en los grupos familiares– no participar de reuniones sociales ni salir de su casa, excepto para buscar atención médica.
Costumbres argentinas. Según el estudio de Offerwise, cuatro de cada diez argentinos cree que “la importancia de la Navidad ha aumentado” debido a la distancia social. La pandemia también generó nuevos hábitos de celebración en los que la tecnología aparece como elemento central de conexión con familia y amigos.
Además, el 61% de los consultados dijeron que “evitarán lugares o puntos turísticos” para los feriados de Navidad y Año Nuevo.
Los expertos de la SAP, en tanto, resaltaron que el cuidado de los más chicos es más difícil, porque tienen “más necesidad de socializar que los adultos”, por lo que recomiendan “buscar actividades al aire libre que impliquen la menor utilización de juegos comunitarios”.
Para los cuidados del verano, resaltan que “si bien hay un amplio consenso científico respecto de que tanto las piletas como otros espejos de agua no son transmisores del coronavirus, se debe evitar situaciones de cercanía interpersonal” para no fomentar posibles transmisiones.