Pablo Schoklender ya depositó los 40 mil pesos de caución que le impuso la Cámara Federal para recuperar la libertad, y durante el transcurso del día abandonaría el penal federal de Ezeiza.
La cifra, cien veces menor que la que impuesta originalmente por el juez federal Norberto Oyarbide, fue pagada por la defensa de Schocklender, según aseguró uno de sus abogados defensores, Gonzalo Romerto Victorica.
"Por cómo suele actuar el juez Oyarbide seguramente Pablo saldrá en libertad directamente desde la prisión, sin tener que pasar antes por los tribunales federales de Comodoro Py", declaró Victorica a la agencia DyN.
Esta mañana se supo que la Sala Uno de la Cámara Federal porteña rebajó a 40 mil pesos el monto de las cauciones que deberán pagar los hermanos Sergio y Pablo Schoklender y el contador Alejandro Gotkin para recuperar la libertad.
Así, el tribunal desautorizó al juez Oyarbide, quien había establecido una fianza de cuatro millones de pesos para los hermanos Schoklender y de dos millones para Gotkin, los tres detenidos en el marco de la investigación por las presuntas irregularidades en la Misión Sueños Compartidos, de la Fundación Madres de Plaza de Mayo.
En sendas resoluciones firmadas esta mañana, los jueces Eduardo Freiler y Jorge Ballestero coincidieron en la drástica rebaja de las fianzas, en tanto que el tercer integrante del tribunal, Eduardo Farah, había considerado "ajustada a derecho" la decisión de Oyarbide de imponer cauciones millonarias.
El voto de mayoría concluyó que la decisión de Oyarbide "no se centró en la apreciación estática de la composición actual de su fortuna en miras a definir la fuerza necesaria para sujetar la voluntad del imputado al correcto desarrollo del proceso. Por el contrario, lejos de ese pronóstico, proyectó su razonamiento sobre variables históricas y evolutivas del patrimonio del recurrente íntimamente vinculadas a los hechos de la causa".
"Esta estimación, propia de otra clase de medidas cautelares... resulta absolutamente foránea a la temática que aquí correspondía atender. (Oyarbide) transitando una senda ajena a la materia que se hallaba en discusión, arribó a la imposición de una suma dineraria en cuyos antecedentes y magnitud se escudó la implícita denegatoria del derecho reconocido ante esta Alzada", esto es la libertad de los imputados.
Sobre Sergio Schoklender, el fallo advierte que "corresponde atender a su genuina situación pecuniaria -actual y efectiva-, en la que no sólo cabe señalar los bienes que la constituyen, como se intentó perfilar en la resolución, sino, además, recordar las restricciones que la afectan".