La noticia de la muerte de la familia Pomar fue el peor final para esta historia. Una de las razones del accidente fatal fue el mal estado de la ruta 31, donde el auto de los Pomar volcó. Vecinos aseguran que la curva en la que sucedió el hecho no está en condiciones.
Según peritos en accidentología, "la ruta 31 es una alternativa para sortear la parte conflictiva de la ruta 8. No está demarcada y casi no hay señales verticales. Yo la tomé de día, pero no se me ocurriría tomarla de noche", dijo el jefe de seguridad vial de Cesvi, Gustavo Brambati.
Este camino es más peligroso debido a la falta de iluminación. Según la licenciada en criminalística Olga Haydée Fernández Chávez "la única forma de ver el camino es con señales retrorreflexivas, no alcanza con iluminación artificial. Se necesita hasta 60 metros de anticipación para ver una curva", consignó a La Nación.
Antecedente. En la curva donde se accidentaron los Pomar se había registrado un grave accidente en agosto pasado en el que murieron tres personas. Aquel día una moto en la cual iban tres personas chocó de frente con un Gol dejando un saldo lamentable.
Osvaldo Siri, jefe de cuartel de bomberos de Salto, explicó que "la curva es amplia y peligrosa para el que desconoce el lugar porque se cierra de golpe". Pero Fernando Pomar solía ir por ese camino, lo que "a veces termina jugando en contra porque el conductor se relaja", explicó Brambati.
Marcelo Díaz, ayudante mayor del cuartel de Bomberos de Salto, dijo a Clarín que "es una curva complicada, en la que hubo varios accidentes y vuelcos. No es un giro muy pronunciado, pero se cierra de golpe y no está bien señalizada. Por el mal estado de la ruta, también es común que haya autos que rompan cubiertas y llantas".
Sólo promesas. Debido al pésimo estado de la ruta, el gobierno bonaerense había anunciado días antes de las elecciones legislativas de junio, un plan de obras por 54 millones de pesos para repavimentar la ruta, financiado con un préstamo del Banco Mundial. La obra nunca comenzó.