“No a la judicialización de los médicos”, “mejoras en la provisión de equipamientos sanitarios” y “cobro del bono” determinado por el gobierno nacional, fueron algunas de las consignas que llevaron adelante los médicos nucleados en la Red de Médicos Integrada de Argentina (Redima) en el centro de la Ciudad de Buenos Aires y en el marco de la cuarentena por el Covid-19. La marcha autoconvocada, considerada por los organizadores de “carácter pacífica”, se hizo bajo el lema “Los trabajadores de la salud somos muchos. Ahora somos uno”, tuvo alcance nacional y se realizó “sin banderas políticas ni gremios”.
Por otra parte, desde la Asamblea de Residentes y Concurrentes de las Ciudad dieron a conocer un documento en el que expresan su preocupación “por las falencias estructurales y en la gestión del planeamiento sanitario del sistema de salud porteño” en general pero en particular del Hospital Ramos Mejía. También destacan la falta de personal y su redistribución en otros sectores. Según el documento que publicaron los residentes, “estos hechos quedaron en evidencia ante el aumento de la demanda hospitalaria”.