Jorge Julio López permaneció secuestrado entre octubre de 1976 y junio de 1979 durante la última dictadura cívico-militar. El 28 de junio de 2006 declaró como testigo en la causa contra el expolicía de la Bonaerense Miguel Etchecolatz, hombre al mando de sus secuestradores. El 18 de septiembre de ese año, fecha del alegato final en el juicio, desapareció por segunda vez, sin que se tengan rastros de su paradero hasta la actualidad. Se cumplen este martes 12 años de aquel día.
Rubén López, hijo de Julio y quien encabezará esta jornada una marcha en reclamo de justicia por la desaparición de su padre indicó en declaraciones al medio Infocielo: “Es una sensación de bronca, de impotencia, porque no sabemos qué pasó. No les puedo contar, no porque no quisiera, sino porque la justicia y los jueces no están siendo justos con nosotros”.
En ese marco, Rubén agregó: "Ver que estos tipos siguen estando en la calle, que a mi viejo no se lo cuidó, no se lo protegió que seguramente, si alguien lo amenazó, él no le tuvo miedo. Porque él lo que quería era contar lo que había visto, lo que había sufrido, para que se haga justicia”.
Miguel Etchecolatz pidió ser reincorporado a la Policía Bonaerense
Marchas. Un acto estaba previsto para las 13 frente a los Tribunales Federales de La Plata. En esa ciudad además, el Encuentro Memoria, Verdad y realizará una concentración a las 18 en la Plaza Moreno.
Actividad. En un nuevo aniversario de la desaparición, a las 20 en el cine Gaumont de Capital Federal tendrá lugar la avant premiere del documental “Todxs somos López. Donde empieza la vida y termina la muerte”, acerca de la vida del militante víctima de delitos de lesa humanidad.
Cuadernos. En una coyuntura en la que una de las causas más importantes del país se disparo a partir de las anotaciones de un chofer en cuadernos, es relevante recordar que según su familia, Julio López también dejó todo anotado en cuadernos.
F.D.S./F.F.
