Agencias
Continúa en observación médica la alumna de 12 años que salvó su vida de milagro luego de lanzarse de un cuarto piso del Colegio del Libertador, en el barrio de Flores, por haber sido amonestada.
En el sanatorio Los Arcos de Palermo permanece internada por heridas en la espalda y otras partes del cuerpo, pero los médicos confirmaron que está fuera de peligro y que deberá realizar un tratamiento psicológico.
Por su parte, las autoridades del establecimiento aseguraron que la joven se arrojó al vacío por temor a ser castigada por sus padres cuando se enteraran sobre la sanción que le habían aplicado. Sucede que la estudiante entró al aula en horario de almuerzo cuando todos los estudiantes lo tienen prohibido y una maestra la sancionó.
Según sus compañeros, la joven es muy estudiosa, aunque solía hacer travesuras. Afortunadamente, cayó en un patio interno del establecimiento sobre un piso de goma eva, lo que ayudó a amortiguar el golpe. Antes de tomar la decisión de lanzarse al vacío, según contaron testigos, la joven repetía la frase: “Me quiero morir, me quiero morir”. En el momento del incidente, dos compañeras intentaron con esfuerzo retenerla, pero no lograron frenarla.
En el registro de comportamiento de la alumna figura que había recibido apoyo psicológico en dos ocasiones anteriores y también circuló la versión de que la menor sufría una situación familiar complicada con rasgos de violencia familiar.
Asimismo, trascendió que la chica tenía algunos comportamientos extraños durante las clases. “Se la pasaba diciendo que quería que los estantes del aula se le vinieran encima”, contó una compañera a los medios.
