“Ella sabe demasiado”, podría ser el título de una novela policial, pero en este caso es una aseveración certera sobre una de las protagonistas del caso de corrupción que puso en jaque a la gestión kirchnerista. Victoria Carolina Bereziuk, la escultural rubia ex secretaria privada de Claudio Uberti, el funcionario K echado del Gobierno luego de ser sindicado como uno de los responsables de la famosa valija, es la que sabe demasiado y ahora ya no se esconde.
Su nombre apareció por primera vez en la lista de pasajeros que se subieron la noche del 3 de agosto de 2007 al Cessna Citation donde viajaron los 800 mil dólares que el Gobierno venezolano envió a Buenos Aires. Todavía el destino de esos fondos es confuso e incierto, pero todas las pruebas indican que ella sabe la respuesta. A partir de ahí, el nombre Bereziuk se hizo conocido, primero en los oídos de la política argentina, y después en el resto de la opinión pública. Y así como dejó el anonimato, la blonda abandonó la política de exposición. Abandonó, al menos con su presencia, la gestión pública, y se recluyó en la casa de sus padres en Martínez
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