Aprovechando el furor por la nueva película animada que se estrena en cines en la Argentina el 31 de octubre, Booking.com habilita reservar la mansión de Los Locos Adams, por tiempo limitado, un día con su noche, desde Argentina.
Ubicada en el histórico barrio Clinton Hill de Brooklyn, la casa cuenta con más de 343 metros cuadrados ambientados al estilo del siglo XIX que transmite el aura macabra que identifica a la famosa familia Addams.
Decorada con floreros que solo tienen tallos de rosas, hasta se puede escuchar el famoso.¿Llamó usted? de Largo. Quienes reserven este hospedaje tendrán disponibles tres habitaciones, y dentro de ellas podrán hacer experimentos con máquinas de Pericles, jugar con la muñeca decapitada de Merlina y cuidar algunas de las plantas carnívoras de Morticia.
Para reservarla hay que visitar Booking.com el próximo 28 de octubre a las 13 (horario de Argentina) para poder reservar una de las 4 estadías exclusivas de una noche, entre el 29 de octubre y el 1 de noviembre. Teniendo en cuenta que las reservas en Nueva York son bastante elevadas, el precio es más que acomodado: 101,10 dólares la noche.
Recordemos que esta cinta animada, cuyo título original es The Adams Family, que ya se estrenó en lso Estados Undios, tendrá una secuela que se presentará en octubre de 2021. El anuncio llega días después de que el filme recaudara en EE.UU y Canadá 30.3 millones de dólares a lo largo de su fin de semana de estreno. Con esta recaudación, el filme se situó en un meritorio segundo puesto sólo por detrás de Joker, que logró la medalla de oro el fin de semana con 55 millones de dólares.(Aquí el trailer del filme animado que se estrena el próximo 31 de octubre en Argentina).
La siniestra pero divertida familia Addams regresó a la gran pantalla con esta cinta de animación de los realizadores Conrad Vernon y Greg Tiernan que ha contado, para su doblaje en versión original, con las voces de Charlize Theron, Chloe Grace Moretz y Óscar Isaac.. Y muestra a los Addams haciendo todo lo posible por encajar y adaptarse como puedan a un vecindario muy normal en el que sus peculiares costumbres y forma de ser no pasan nada inadvertidos.