Kinky Boots, que vuelve al escenario porteño a comienzos de abril, es un proyecto de la novel empresa Rimas Producciones, liderada por Florencia Masri, Alejandro Zaga Masri y Ricky Pashkus. Además encararon la concreción del Instituto Argentino de Musicales (IAM), Didipro, La Compañía de Teatro Musical, CENATEM y la Revista Divague.
Ante el regreso de la obra protagonizada por Martín Bossi al Teatro Astral y la reposición también en Madrid, así como la realización del primer largometraje de Julio Chávez, entre otros proyectos, conversamos con Florencia Masri, una de las tres encargadas de impulsar tantas novedades interesantes, para preguntarle cuál es el mensaje que les interesa dar a partir de las propuestas que encaran. Ella, que desde las oficinas de la empresa familiar en Nueva York encara todo con mucha energía (además tiene seis hijos), reconoce que siempre fue “una persona muy energética. Al crecer tuve mucha exigencia al ser hija única; mi padre era un visionario y mantenía muchísima exigencia consigo mismo, con todos alrededor pero especialmente conmigo. Fue el maestro más duro y más sabio que tuve. Además soy una persona con mucha energía, aunque también tengo momentos en los que me doy los espacios para meditar o descansar. Pero la realidad es que me estimula, me gusta estar en movimiento, me encanta tener una familia grande y estar interactuando con la gente".
- VivoPerfil- Tu hijo Alejandro también es parte de Rimas, ¿tiene la misma impronta?
- Florencia Masri- Si bien él también tiene mucha energía, es el más tranquilo de los tres en Rimas. Tiene la misma impronta emprendedora a sus 23 años, pero entre Ricky y yo somos un dúo dinámico que a veces compite por ver quién de los dos hace más cosas.
- VP - ¿Qué viste en Ricky Pashkus para asociarte con él?
- FM- Fue un encuentro increíble y mágico que comenzó luego de que tuvo una entrevista con Alejandro cuando terminó el secundario para que Ricky fuese su mentor. Después él se quiso juntar conmigo para darme una devolución que resulté tener un grado de empatía y de sensibilidad que me puso la piel de gallina. No nos conocíamos y me resulto muy emotivo: solo un padre que vive el día a día de un chico tendría la posibilidad de describirlo en sus fortalezas y debilidades, en lo que tenía que trabajar, exactamente era. Nos unimos en la sensibilidad que tenemos, no solamente artística, para con la gente y el mundo, y en lo que queremos transmitir en todo lo que hacemos juntos. Fijate que en los momentos más difíciles como en la pandemia, creamos una escuela y emprendimos proyectos nuevos. Vi en él algo que para mi era inusual encontrar en otras personas.
- VP- ¿Qué obras eligen para producir?
- FM- Para mi lo más importante de que tengan cierta estética, excelencia artística y profesional. Pero los mensajes que queremos transmitir son una parte muy importante de nuestros proyectos, tanto la película de Julio Chávez que acabamos de filmar como Kinky Boots, que me tocó profundamente cuando la vi en Nueva York hace tiempo ya por lo que hablada del mandato familiar, la transformación, las amistades profundas. Esos son los mensajes que queremos dar y hablan de quienes somos. Los elementos que nos definen como productora son la inclusión, cambiar el mundo llevando un mensaje de que puede ser mejor y que queremos facilitarle al artista la inserción laboral, al igual que a la gente de producción. En IAM, la escuela, tenemos muchos alumnos becados, y desde La Compañía de Teatro Musical y Juvenil les damos la oportunidad a chicos y jóvenes que no tienen los medios pero si el deseo de cumplir su sueño de estar en una producción. Es tan importante como la educación paga y las obras que hacemos.
- VP- ¿Qué perfil buscan en la gente que trabaja con ustedes?
- FM- No buscamos otro perfil que la dedicación al trabajo, nos consideramos una familia y con cada proyecto que hacemos tratamos de generar un clima en el cual todo el mundo se sienta que es parte de una familia. Por eso buscamos gente que se comprometa y que tenga pasión por lo que hace. una cierta energía que hace que las cosas fluyan.
Con una polenta interminable, Florencia se despide contando: "Estrenamos Kinky Boots en abril, en dos continentes distintos, el 8 en Buenos Aires y el 27 en Madrid tenemos en producción de un documental que llevaremos a los festivales junto a la película de Julio Chávez. Además estamos preparando un show con un muy talentoso coreógrafo y bailarín en la Argentina para llevarlo al mundo. Siempre estamos en movimiento".