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INFORME

Mujeres en ciberseguridad: crecen en representación, pero son el 25% de la fuerza laboral

La demanda de trabajadores para el sector de ciberseguridad sobrepasa ampliamente la oferta. La inversión en igualdad de formación y oportunidades es también una posibilidad para cubrir los más de cuatro millones de puestos vacantes en el área que requiere una formación específica. La participación de las mujeres tuvo un importante crecimiento –del 150%– en la última década, pero sigue siendo baja.

mujeres en la ciberseguridad
CIBERSEGURIDAD. Un campo que continúa siendo predominantemente masculino. | Shutterstock

El campo de la ciberseguridad continúa siendo predominantemente masculino: las mujeres representan menos del 26% de la fuerza laboral, aunque también se evidencia un aumento significativo en su participación. El crecimiento fue del 150% en la última década, y se espera que en 2025 representen el 30% del total.

Los datos se desprenden de un informe del Consorcio internacional de Certificación de Seguridad de Sistemas de Información (ISC) en el que señalan además que esta realidad cambia cuando se trata de puestos altos: en los cargos de mayor jerarquía la representación de las mujeres es del 17%, mientras solamente el 10% tiene el puesto de presidente o CEO.

La oportunidad del sector es única, porque para 2023, según un informe del Banco Mundial, había alrededor de 4 millones de vacantes disponibles en todo el mundo. Según las estimaciones de este Consorcio, en 2023 5,5 millones de personas trabajaban en ese rubro, lo que representa un aumento del 8,7% en un año en el que la demanda sigue superando a la oferta.

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La firma Thetris elaboró un documento titulado “Mujeres en IT y ciberseguridad” en el que, concluyeron, el principal obstáculo en la participación equitativa “continúa siendo la percepción propia de que su formación es inadecuada, así como la falta de fe en sus propias capacidades”.

Aun así, consideran, la participación seguirá creciendo: se espera que sean el 35% del total en 2031. Ese porcentaje, si bien está lejos de la equidad absoluta, representa un fuerte avance: en 2013 las mujeres eran apenas el 10% del total y en 2019 esta cifra llegó al 20%.

Aquí representan el 34% de los estudiantes de carreras tecnológicas

El hecho de que el avance en este rubro haya sido tan grande, señalan también, está relacionado con una mayor demanda: los perfiles tecnológicos son cada vez más solicitados por la evolución de la Inteligencia Artificial y el considerable aumento de los ciberataques.

Durante la última Conferencia Mundial sobre la Creación de Capacidades Cibernéticas, de la que participaron 60 gobiernos de todo el mundo –y que contó con el apoyo del Banco Mundial–, se llegaron a algunas conclusiones relevantes sobre el tema. En el sitio web del encuentro destacaron que, así como “el mundo digital afecta cada aspecto de nuestras vidas” ya que “nos permite conectar, trabajar, aprender y viajar, y juega un papel importante en la protección de necesidades esenciales como la comida, el agua y la atención médica”, estas ventajas también vienen acompañadas de desafíos tanto para gobiernos como para la sociedad en general. “Para asegurar un mundo digital libre, abierto y seguro, cada país debería tener los recursos, conocimientos y habilidades necesarios para invertir en su futuro digital. Las naciones deberían trabajar juntas y apoyarse mutuamente con estas capacidades, para que ningún país se quede rezagado en su evolución digital. Después de todo, una cadena es tan fuerte como su eslabón más débil”.

Esa inversión también debe tener un componente de género. El Banco Mundial elaboró un informe en el que estudió modelos innovadores en este sentido.

“Los programas de capacitación más exitosos aprovechan la educación formal, como los programas universitarios, al igual que las oportunidades de aprendizaje permanente para la adquisición de nuevas y mejores habilidades en la fuerza laboral existente”, señala un artículo publicado por esta institución.

Como ejemplo citan casos como el de Nigeria, país en el que “la Fundación CyberSafe puso en marcha la beca CyberGirls, un programa de capacitación en ciberseguridad de siete meses dirigido a mujeres de entre 18 años y 28 años”. Para este año está previsto que 1000 jóvenes participen de la iniciativa.

“En India, Microsoft se asoció con el Consejo de Seguridad de Datos y puso en marcha CyberShikshaa, un programa gratuito de capacitación para mujeres graduadas de ingeniería de ciudades pequeñas que dura cuatro meses. Desde 2018, CyberShikshaa ha capacitado a más de 1000 mujeres en el campo de la ciberseguridad”, destacaron.

También señalaron el caso de Israel, país en el que la educación en ciberseguridad empieza en la escuela secundaria.

Desde el Banco Mundial afirmaron que, “para subsanar el déficit de competencias en esta área, debemos cerrar la brecha de género”.

La incorporación acelerada de las mujeres podría ser una forma de responder a la demanda y aprovechar los beneficios que supone un acceso más igualitario a estos puestos, tanto para las mujeres como para el conjunto de las empresas.

En Argentina las mujeres representan todavía una baja proporción de los estudiantes de carreras vinculadas con la tecnología: son el 34% del total.