El Gobierno ya anunció que se convocará a una licitación donde se invertirán 50 millones de pesos para la reactivación de la base aérea de Chamical, en La Rioja. Buscan convertirla en un centro operativo de drones de las Fuerzas Armadas.
En la unidad militar, dependiente de la Fuerza Aérea, funciona el Centro de Experimentación y Lanzamiento de Proyectiles Autopropulsados (CELPA I), que la semana pasada fue visitado por el ministro de Defensa, Julio Martínez.
Durante su visita, el ministro destacó que "el objetivo es que la Base se convierta en un centro donde se realicen los ensayos y vuelos junto con la formación y el adiestramiento de los operadores y pilotos de drones de todas las Fuerzas Armadas".
Asimismo, resaltó que desde el año pasado se trabaja para recuperar las capacidades de la Base Aérea Chamical y que es intención del Ministerio incrementar la cantidad de personal militar y civil de la misma, según informa la agencia DyN.
La base de Chamical, está ubicada a 150 kilómetros al sureste de la ciudad de La Rioja. Comenzó a funcionar en 1946 como un centro de tiro y bombardeo, y luego se hicieron desde allí lanzamientos de distintos tipos de cohetes. Con el correr de los años está base fue disminuyendo sus capacidades operativas, por lo cual se la tuvo que denominar "destacamento Chamical".
Durante enero de 2014, las autoridades de la Fuerza Aérea ordenaron que la base pase a llamarse "Centro de Experimentación y Lanzamiento de Proyectiles Autopropulsados I Chamical". Allí comenzaron a realizar pruebas de proyectos varios, como los prototipos de vehículos no tripulados Vigía II y Aukan I.
El ministro hizo especial hincapié en el principal proyecto de la base: "avanzar en su definición como un centro de referencia de aeronaves remotamente tripuladas".
Por ejemplo, el Ejército argentino posee el Lipán M3. Un vehículo aéreo no tripulado (VANT) para vigilancia, reconocimiento aéreo e inteligencia.
En octubre de 2016, la Dirección General de Investigación y Desarrollo de la Fuerza Aérea Argentina, presentó dos prototipos de aviones no tripulados.
El primero, llamado Aucan Clase 1 FAS, se destinará al área de investigación, instrucción y adiestramiento del personal. Por su parte, el segundo avión Clase 2 FAS, está preparado para desempeñarse en tareas operativas de inteligencia, de reconocimiento y de búsqueda.
Respecto a la Armada, en 2011 se presentó el proyecto UAV Guardián, avión no tripulado para tareas de búsqueda, reconocimiento, detección e identificación de blancos en tiempo real. Además, puede ser operado desde un buque y brindando apoyo anfibio a la Infantería de Marina.