Con emociones, sueños y el cielo en colores, empiezan a festejar Año Nuevo en la otra punta del mundo
Sidney, que se autoproclama "la capital mundial del Año Nuevo", hizo como siempre de su bahía un espectáculo único. Más de un millón de personas presenciaron el show que este año consumió 8 toneladas de fuegos artificiales.
Sidney recibe el 2024 con su acostumbrado show de color en el cielo. |
AFP
Multitudes jubilosas comenzaban este domingo a celebrar la llegada de 2024, y como es habitual el colorido de los fuegos artificiales en Sidney, que se autoproclama "la capital mundial del Año Nuevo", se levaba las palmas con un espectáculo formidable. Más de un millón de personas abarrotaron la orilla del puerto de esa gran ciudad australiana para admirar el show en el cielo, que esta vez consumió nada menos que ocho toneladas de fuegos artificiales.
Incluso antes del anochecer, ya había decenas de miles de personas reunidas en puntos estratégicos alrededor del icónico Harbour Bridge de la ciudad, desafiando un clima inusualmente húmedo y esperando ansiosas la llegada del Año Nuevo.
De todas maneras, en realidad, el primer punto del planeta que celebró Año Nuevo fue la isla Kiritimati, en la nación insular de Kiribati, que se encuentra en el Pacífico Sur y cuenta con apenas unos 7.300 habitantes.
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Estos disfrutaron de la llegada del 2024 cuando en la Argentina aún eran las 8 de la mañana del 31 de diciembre. Luego, unos 15 minutos después, le tocó el turno a las Islas Chatham, en Nueva Zelanda.
Una hora más tarde ingresó el nuevo año en Tonga y Samoa.
Por otro lado, Auckland, otras de las principales ciudades de Nueva Zelanda, se robó todas las miradas con su cuenta regresiva en la torre Sky, en el centro de la ciudad, que se convirtió en la primera de las más pobladas en recibir al 2024.
Para tal evento dispusieron de un impresionante show en la bahía de la capital de neozelandesa.
A su vez, Japón hizo sonar las campanas de los templos, mientras que sus habitantes se acercaron a los mismos y a los santuarios para recibir el 2024. De hecho, en el Templo Tsukiji, en Tokio, entregaron leche caliente y sopa de maíz a los asistentes.
La bahía de Sidney, con su habitual despliegue de fuegos artificiales abrió la celebración mundial del Año Nuevo. (FOTO AFP)
Mientras tanto, Ras Al-Khaimah, ciudad de los Emiratos Árabes Unidos da la bienvenida al Año Nuevo con una "alfombra" de pirotecnia acuática, que también incluyó más de 1.000 drones en un esfuerzo por batir dos récords Guinness: de "exhibición de drones en línea recta más larga" y de "cadena de fuegos artificiales acuáticos flotantes más larga".
China celebró el nuevo año calendario de manera relativamente tranquila, en un clima marcado por la ausencia de fuegos artificiales en la mayoría de las ciudades principales, medida tomada con rigurosidad en función de la seguridad y la preocupación por la contaminación. Aunque según las imágenes, el juego de luces es hipnotizante.
El año 2024 da inicio en Francia con un despliegue de fuegos artificiales haciendo brillar la icónica Torre Eiffel, marcando también el comienzo de un año olímpico, ya que después de un siglo de espera, París tiene el honor de ser la anfitriona de los Juegos Olímpicos
El último lugar del mundo que recibe el Año Nuevo es la Isla Howland y Baker, ambas forman parte del territorio de Estados Unidos, siendo dos de los catorce territorios no incorporados de dicho país. En esas naciones, el Nochevieja llega prácticamente un día después que en el resto del mundo.
Acontecimientos fenomenales
Entre los hechos notables del 2023 que se va quedaban el crecimiento exponencial de las herramientas de inteligencia artificial, el primer trasplante de ojo completo del mundo y una "Barbie manía" desatada por la exitosa película dedicada a la famosa muñeca de Mattel. Además, India superó a China como el país más poblado del mundo y se convirtió en la primera nación en posar un cohete en el lado oscuro de la luna.
También fue el año más caluroso desde que comenzaron los registros en 1880, con una serie de desastres provocados por el clima que afectaron desde Australia hasta el Cuerno de África y la cuenca del Amazonas.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) calcula que casi dos millones de gazatíes han sido desplazados desde que comenzó el asedio israelí, aproximadamente el 85% de la población en tiempos de paz. Con los que antes fueron bulliciosos barrios de la ciudad de Gaza, reducidos hoy a escombros, quedan pocos lugares donde celebrar el año nuevo, y menos seres queridos con quienes celebrarlo.
"Fue un año negro lleno de tragedias", dijo Abed Akkawi, que huyó de la ciudad con su esposa y sus tres hijos. Este hombre de 37 años, que ahora vive en un refugio de la ONU en Rafah, en el sur de Gaza, dijo que la guerra había destruido su casa y matado a su hermano.
Gente feliz en la playa de Kerobokan, en la isla de Bali, Indonesia, celebrando el Año Nuevoi, (FOTO AFP)
Pero aún así, se aferra a modestas esperanzas para 2024. "Dios quiera que esta guerra termine, que el nuevo año sea mejor y que podamos volver a nuestras casas y reconstruirlas, o incluso vivir en una tienda sobre los escombros", declaró a la AFP.
En Ucrania, donde la invasión rusa se acerca a su segundo aniversario, se respira entre esperanza y desafío tras el nuevo ataque de Moscú. "¡Victoria! La estamos esperando y creemos que Ucrania vencerá", dijo Tetiana Shostka mientras sonaban las sirenas antiaéreas en Kiev.
"Tendremos todo lo que queremos si Ucrania es libre, sin Rusia", añadió el hombre de 42 años. Algunos en la Rusia de Vladimir Putin también están cansados del conflicto.
"En el nuevo año me gustaría que terminara la guerra, que hubiera un nuevo presidente y volver a la vida normal", dijo Zoya Karpova, decoradora de teatro de 55 años y residente en Moscú.
Putin es el presidente que lleva más tiempo en el cargo en Rusia, desde Iósif Stalin y su nombre volverá a aparecer en las papeletas cuando los rusos voten en marzo.
El rezo del Papa Francisco
En el Vaticano, el papa Francisco rezó por los pueblos que sufre guerras, citando al pueblo ucraniano, los pueblos palestino e israelí, el pueblo sudanés y a los rohinyás.
"Al final de un año, tengamos el valor de preguntarnos: ¿cuántas vidas humanas se han quebrado por los conflictos armados? ¿Cuántos muertos?", dijo Francisco en sus saludos tras el último Ángelus de 2023.
El 2024 se perfila como el año de los comicios, ya que el destino político de más de 4.000 millones de personas se decidirá en unas votaciones que darán forma a Rusia, Reino Unido, la Unión Europea, India, Indonesia, México, Sudáfrica, Venezuela y otros muchos países.
Pero una elección promete consecuencias globales. En Estados Unidos, el demócrata Joe Biden, de 81 años, y el republicano Donald Trump, de 77, parecen dispuestos a repetir en noviembre la carrera electoral presidencial, ya efectuada en 2020.
Como presidente en ejercicio, Biden ha dado muestras en ocasiones de su avanzada edad, e incluso sus partidarios se preocupan por las consecuencias de otros cuatro años suyos en el poder. Pero si hay preocupación por cómo sería una segunda administración de Biden, también la hay por el regreso de Trump.
El expresidente se enfrenta a varias acusaciones, y los votantes podrían decidir si irá a la Oficina Oval o a la cárcel.
