Eduardo López, infectólogo y miembro del comité de expertos que asesora al gobierno frente a la pandemia de covid-19, explicó en diálogo con PERFIL que, en el esquema de vacunación en Argentina, se está implementando un “plan b” o “alternativo”, orientado a a obtener dosis contra el coronavirus de vacunas CoviShield, Sinopharm y Sputnik V -esta última en en mayores cantidades- ante la dificultad de acceder a dosis de Pfizer-BioNTech o Moderna.
Las primeras 580 mil dosis de la vacuna Covishield, producidas por el laboratorio Serum Institute de la India y desarrolladas por la Universidad de Oxford y AstraZeneca llegaron al país el 17 de febrero pasado, mientras que, según la última negociación realizada por el exministro de Salud Ginés González García -antes de su renuncia- se estima que un millón de dosis de la vacuna Sinopharm llegarían a Argentina el próximo 25 de febrero.
En comunicación con este medio, el infectólogo del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez estimó además que “debe haber alrededor de un 30 o 40 por ciento del personal de Salud que falta vacunar”, y, sobre la inmunidad para quienes contrajeron la enfermedad, explicó que hay estudios que hablan de la presencia de anticuerpos “entre siete y nueve meses” después del contagio.
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Sobre las perspectivas que hay en relación al plan de vacunación para los próximos meses, López resaltó que “hay un déficit mundial de vacunas”. “Los países centrales compraron una gran cantidad de vacunas, especialmente de Pfizer, Moderna y en menor medida de Astrazeneca, con lo cual esas vacunas no van a estar fácilmente disponibles para los países periféricos”, detalló.
En el caso de Argentina, dijo, se está implementando un “plan b”. “Un plan alternativo que está vinculado a usar vacunas de origen chino, como la vacuna Sinopharm, en segundo lugar la vacuna de AstraZeneca, fabricada en el eje Argentina-México con el convenio de alrededor de un poco más de 22 millones de dosis, y se está intentando que la vacuna de Rusia, Sputnik V, llegue en mayores cantidades”.
En su primera resolución oficial como ministra de Salud, este domingo Carla Vizzotti aprobó de emergencia la vacuna china Sinopharm, tras una reunión con el presidente Alberto Fernández en la Quinta de Olivos.
Sobre Covishield, la vacuna de AstraZeneca que se elaboró en la India, explicó que los controles de calidad “son los adecuados y el laboratorio que la produjo es productor de vacunas a nivel mundial, fabrica entre 50 y 70 millones de dosis por mes”. “Esto es porque la vacuna de AstraZeneca producida en Argentina por el laboratorio Mabxience del Grupo Insud y finalizada en México, recién estaría disponible en la primera quincena de abril, por lo que para cubrir el déficit, se utilizan las de AstraZeneca que se producen en otro lado”, amplió.
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El infectólogo señaló además que se está negociando con otras vacunas, “como la Corona Vac y la de origen chino CanSino, que tienen buena actividad con una sola dosis, para tratar de mitigar el déficit mundial que hay de vacunas. Para esto hay que hacerlo lo más rápido posible porque hay una competencia importante en ese sentido, no es un tema menor".
Consultado sobre un número posible de inmunizados que podría haber a mitad de año, o a finales de 2021, López no hizo estimaciones y recordó que el programa estratégico de vacunación contra el covid-19 establece prioridad, en primer lugar, “para alrededor de 800 mil personas que son personal de salud, que todavía debe faltar un 30 o 40 por ciento por vacunar”.
“En segundo lugar, los adultos mayores de 70 y 60 años, que son alrededor de 7 millones. Para vacunar a los dos primeros grupos, personal de salud y adultos mayores, habría que tener alrededor de 15 millones de dosis”, manifestó el infectólogo y asesor del gobierno de Alberto Fernández. Actualmente, según detalló el Ministerio de Salud días atrás, el país contabiliza 1.800.000 dosis -entre las dosis de Sputnik V que llegaron en cuatro vuelos y el cargamento de Covishield que llegó el pasado miércoles 17 de febrero- para el plan de vacunación.
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Por otro lado, respecto de qué se conoce sobre el periodo de inmunidad para quienes ya tuvieron coronavirus, López dijo que hay estudios que muestran que “por lo menos por nueve meses hay anticuerpos circulantes, protectores”. “En principio se hablaba de tres meses, pero ya hay estudios que hablan de siete en principio, y ahora de nueve meses, lo que deja más tranquilos a quienes tuvieron la enfermedad”, expresó.
De acuerdo al último reporte de Salud de este 22 de febrero, se registran en total 2.069.751 casos desde el inicio de la pandemia. En la provincia de Buenos Aires y en la Ciudad, donde se acumulan la mayon cantidad de casos, se reportaron en total 863.871 y 227.550 casos respectivamente.
Ante la pregunta de si puede o no que haya una mayor cantidad de casos en Argentina que los registrados y reportados desde el Ministerio de Salud, López destacó que en los estudios de provincia y ciudad de Buenos Aires, "la seroprevalencia, que es la cantidad de individuos que tuvieron anticuerpos ya sea porque se enfermaron o fueron contacto estrecho con una infección asintomática, están entre un 15 y un 16 por ciento”.
Esto, dijo, “significa que se contagiaron muchos: 15 y 16 por ciento para una población de Capital Federal, que oscila en 3 millones de personas, y para el conurbano bonaerense, de alrededor de 10 millones de personas”. Y sumó: “Quiere decir que hay un grupo importante que se contagiaron y no hicieron la enfermedad, o que tenemos más de 2 millones de casos”.
AG/MC
