Estados Unidos tiene listo un plan para evacuar al presidente de Ucrania en caso de un potencial ataque en medio de la escalada de la tensión en torno a una "inminente invasión" de Rusia, algo desmentido por Moscú y calificado como un "invento mediático" en ocasiones anteriores.
El plan de evacuación trascendió poco tiempo después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, reconociera formalmente a los dos estados separatistas y prorrusos del este de Ucrania, Donetsk y Lugansk, algo que elevó la tensión en Europa oriental.
En tanto, ante un inminente conflicto armado, Estados Unidos se anticipó y mantuvo conversaciones con el gobierno ucraniano, su aliado clave en el país que sirve de nexo entre Occidente y Oriente.
El plan de evacuación del gobierno de Ucrania diseñado por Estados Unidos incluye la reubicación del presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, y las condiciones que ameritarían el traslado. Sin embargo, no trascendieron los detalles del plan ante el escenario de guerra que resguardaría el gobierno basado en Kiev en caso de invasión.
Putin aumenta la tensión al reconocer la independencia de regiones prorrusas de Ucrania
Hacia el este de Kiev, la capital ucraniana de casi 3 millones de habitantes situada a 380 kilómetros de la frontera con Rusia, se encuentran las autodenominadas República Popular de Donetsk y la República Popular de Lugansk, dos regiones que se proclamaron independientes en 2014 no reconocidas por la comunidad internacional hasta el momento.
El gesto de Putin de reconocer la independencia de estas regiones, que representan una merma en el territorio ucraniano, escaló el conflicto entre Rusia, Ucrania, Estados Unidos y sus aliados de la OTAN a un nuevo nivel, en línea con los informes estadounidenses de las últimas semanas que resaltan que la invasión de Ucrania por parte de los rusos es "inminente".
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La postura de Rusia
Por su parte, Moscú mantiene su postura y niega la posibilidad de una "invasión" del este de Ucrania e incluso se mostró abierta a conversaciones con la potencia militar líder de la OTAN, Estados Unidos, para evitar un conflicto armado que podría enfrentar a ambos países.
En dichos encuentros, Rusia manifestó sus preocupaciones de seguridad regional frente a la "expansión" de la OTAN hacia el este de la mano de la voluntad de Ucrania de adherirse a la organización de seguridad bajo la órbita estadounidense creada durante la Guerra Fría.
Por su lado, el presidente francés, Emmanuel Macron, habló anteriormente con el presidente estadounidense, Joe Biden, y el presidente ruso, Vladimir Putin, para organizar una cumbre entre los dos líderes. Las dos partes acordaron en principio una reunión, pero solo si Ucrania no es invadida.
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