Leonor Melina Herrera, la mujer acusada de haber matado y enterrado a su marido en el jardín de su casa en Berazategui declaró este martes sobre la desaparición de Juan Manuel Lozada, su esposo. Allí confesó ser la autora del crimen en Nochebuena y detalló el lugar donde estaba enterrada su pareja asegurando que lo hizo porque sufría violencia de género.
Según informó TN, luego de tres días de las desaparición de su esposo, Herrera fue sometida a un interrogatorio policial y reconoció que ella misma apuñaló a su pareja cuando llegó alcoholizado y la golpeó esa noche del 24 de diciembre: "Llegó borracho y me pegó fuerte hasta que me defendí y lo acuchillé", confirmó.
Horror en Berazategui: una mujer mató a su esposo y lo sepultó en el fondo de su casa
La desaparición de Lozada fue denunciada por los hijos que tuvo en un matrimonio anterior. Ellos aseguraron que incluso le preguntaron a Leonor sobre el paradero del hombre pero ella dijo que "no sabía nada", como así también sostuvo su hijo de 17 años, única persona que convivía con la pareja.
Luego de que la Justicia recolectara información sobre la pareja, estableció que posiblemente se daba entre ellos una situación de violencia constante. De este modo, se citó a Herrera a un interrogatorio policial.
Durante lo que duró el momento, Herrera se mostró evasiva con las preguntas referidas a su marido. Sin embargo, minutos después, la mujer terminó rompiendo en llanto y confesando que lo que hizo fue por "defenderse" de los ataques de Lozada, ya que según declaró ella sufría violencia de género por parte de él: "Fui yo. Lo maté pero porque me defendí. Él llegó borracho, me quiso pegar y me defendí. Lo acuchillé", confesó, al tiempo que indicó en qué parte de la casa se hallaba el cadáver.
Cuando los efectivos llegaron al lugar comprobaron que Herrera decía la verdad, y que el cuerpo estaba enterrado a pocos centímetros debajo de una tierra removida. Luego constataron la puñalada en la zona derecha del corazón y se la detuvo a Herrera de forma permanente.
La Justicia sospecha del hijo de 17 años de Leonor, de quien todavía no pueden probar si estuvo o no en el momento del crimen, y si colaboró con su madre en ocultar el cuerpo. De todos modos, Herrera sigue siendo sospechosa de homicidio agravado por el vínculo, aunque podría cambiar la carátula si se prueba que lo que hizo fue en exceso de la legítima defensa.
Por esto se hará un investigación sobre la posibilidad de que haya existido violencia, con la evidencia de que en su cuerpo hay varios hematomas en el sector del pecho, los brazos y las piernas, con data de dos días. Además, el entorno cercano a la pareja confirma la hipótesis de violencia, más allá de que no exista ninguna denuncia hecha en la comisaría.
Una vez juntadas todas las pruebas, Herrera será indagada. Por ahora, continúa detenida.
MM