En medio de la pandemia, la Federación de Trabajadores de la Sanidad (FATSA) anunció un paro para este jueves 29 de julio pero el Ministerio de Trabajo lo frenó al dictar una nueva conciliación obligatoria en ese prolongado conflicto salarial.
Dicho cartera laboral dispuso "prorrogar a partir del 28 de julio de 2021, y por el término de cinco días, la conciliación obligatoria dictada el 30 de junio de 2021, impuesta a la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina".
La diferencia de esta nueva conciliación con la anterior, además de los 10 días menos de extensión, es que no incluyó un llamado a las partes para realizar una audiencia en la sede de la cartera laboral con una fecha fijada.
Los trabajadores de sanidad paran el próximo jueves en reclamo de un aumento salarial
Esto sí había sucedido en la anterior oportunidad, aunque al final el Gobierno terminó suspendiendo la reunión a la que había convocado, alegando que estaba trabajando en hallar una solución al financiamiento de las compañías del sector.
La nueva intervención de Ministerio liderado por Claudio Moroni sí exhortó a las partes a "mantener la mejor predisposición y apertura para continuar negociando los temas sobre los cuales mantienen diferencias y contribuir de esta manera, a la paz social".
Previo al anuncio, los empleados de un sector del FATSA, conducidos por uno de los lideres de la CGT Héctor Daer, y la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina (ATSA), informaron sobre la medida de fuerza en reclamo de aumento salarial del 45%.
"Las escalas salariales se encuentran vencidas y luego de largas negociaciones no se ha podido acordar una nueva escala en cada convenio colectivo", advirtieron desde el sindicato. También denunciaron la negativa de "concretar los justos aumentos salariales".
"Nos asiste la legitimidad de nuestro reclamo que es inclaudicable. No queremos promesas ni deseos, queremos la recomposición salarial urgente del sector asistencial", señaló en su cuenta de Twitter la filial bonaerense de ATSA.
La posición de los empresarios del sector salud
Desde el empresariado manifiestan no estar en condiciones para otorgar un aumento a los empleados si previamente no se actualizan los aranceles que definen los financiadores (obras sociales, prepagas y el PAMI).
“Asumimos nuestra responsabilidad de generar los recursos necesarios para pagar salarios y poder prestar servicio normalmente, pero esos recursos no los generamos libremente", señaló sobre el conflicto laboral la Federación de Prestadores de Salud (FAPS).
Los empresarios pretenden que el Gobierno autorice el alza en las cuotas de las prepagas, para llegar a una solución. En ese marco, un grupo de firmas logró un fallo judicial favorable para lanzar la versión de una inminente suba del 26 por ciento en las cuotas.
JFG / ds
