Silvina Batakis tiene su primer día al frente del Ministerio de Economía. Alrededor de las 8:30 de este lunes llegó a la Quinta de Olivos, en donde fue recibida por el presidente Alberto Fernández, con quien desayunará para delinear los próximos pasos a seguir.
La flamante sucesora de Martín Guzmán fue elegida a última hora del domingo y se trata de una figura ligada al riñón de Daniel Scioli, cuando fue la ministra económica el actual titular del Ministerio de Desarrollo Productivo era gobernador de la provincia de Buenos Aires. En primera instancia, Batakis tendrá la misión de contener una corrida bancaría y una disparada del dólar tras la incertidumbre generada en los mercados por la crisis política del oficialismo.
La agenda próxima de la funcionaria, en paralelo, incluirá la renegociación inminente de la deuda con el Club de París, que su sucesor tenía programada para este martes, la continuidad del mercado de bonos en pesos, el cepo ajustado a las importaciones para acumular reservas, la aceleración de la inflación y la continuidad del acuerdo con el FMI.
Se presume entonces que esa es la agenda que la nueva funcionaria estaría repasando con el presidente en su primer cara a cara desde que fue elegida. En la reunión también estarían el canciller Santiago Cafiero y otras personas de confianza del presidente.
Una vez que culmine la reunión Batakis iría al Palacio de Hacienda para comenzar sus tareas al frente del Ministerio y por la tarde el presidente le tomaría la jura en Casa Rosada, algo que a esta hora no está del todo confirmado.
Del auto a Economía
Minutos antes de que Batakis ingrese a la Quinta de Olivos, el ministro de Desarrollo Productivo y ex gobernador bonaerense Daniel Scioli contó que fue el intermediario entre el presidente y la nueva ministra durante las negociaciones del domingo a la tarde.
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En declaraciones a Radio 10, Scioli manifestó que cuando su nombre tomó fuerza para suceder a Martín Guzmán, fue él quien la llamó para informarle que desde Presidencia se intentaban comunicar con ella. La entonces secretaria de Provincias del Ministerio del Interior atendió y dijo que estaba manejando, que en cuanto pueda se comunicaba.
Unos minutos después, cerca de las 20 horas de ayer, ya estaba al tanto de la noticia: iba a ser la nueva ministra de Economía.
En ese contexto, además de la agenda inmediata que plantea el dólar, los bonos y la negociación con el Club de Paris, la funcionaria tiene que comenzar a trabajar en un plan de contención para la inflación y definir cómo se encararán las próximas revisiones del acuerdo con el FMI.
Sobre el último punto se sabe que el país viene de aprobar la primera parte del proceso pero son muchos los analistas económicos que sostienen que la próxima revisión enfrentará un momento más complejo y que hasta no se cumplirán las metas planteadas en el programa.
