Gustavo González: “Ni en el 2001 ni en el 2003 la participación electoral ha sido tan baja”

La derrota del PRO en su “zona cero” marca un punto de inflexión en el mapa político argentino, con Javier Milei consolidándose como figura central de cara a octubre.

Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con el politólogo, Gustavo Damián González, quien comentó que, “la capital federal es el kilómetro cero del PRO, allí nació, creció, se reprodujo y la gran pregunta es si está a punto de firmar su partida de función”.

El PRO sufrió una derrota significativa en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, donde desde 2007 había mantenido su hegemonía con porcentajes que superaban el 50%. Esta vez, quedó relegado al tercer lugar con solo el 15% de los votos. Para González, “las acciones del PRO se han bajado”, y la fecha de la elección, un domingo con poco margen para negociar al día siguiente, agravó el golpe político.
Un viraje en el electorado porteño.

Zonas como Belgrano, Núñez y Palermo, históricamente favorables al PRO, viraron su voto hacia La Libertad Avanza. “Es ahí en el epicentro en donde tiene la mayor cantidad de votos, es donde se le coló a Dornis y termina siendo una elección que encima termina ganando”, subrayó González.

Para el analista, la elección fue mucho más que una disputa local. “Todo lo que sucede en la Capital Federal se nacionaliza”, explicó, remarcando que el Gobierno Nacional usó a fondo sus recursos para capitalizar la elección como un triunfo propio. “El presidente agradeció a todos los ministros por formar parte de la campaña. Eso está mal”, denunció.

El desplazamiento de Mauricio Macri

González fue categórico al referirse al rol de Mauricio Macri: “Ayer fue herido de muerte, en términos políticos por lo menos en el corto plazo”. Según su visión, el expresidente asumió un protagonismo central en la campaña y terminó debilitado.

“El próximo acuerdo va a ser más con Ritondo y con otros dirigentes del PRO que con Mauricio Macri”, vaticinó, y agregó con tono irónico: “No veo que vuelvan las milanesas a la discusión”, refiriéndose a la cercanía que alguna vez hubo entre Macri y el oficialismo libertario.

¿Qué votaron los porteños?

Frente al intento del gobierno de nacionalizar el voto, González también analizó la lógica del elector. “Muchos de los porteños no fueron a votar al legislador porteño, fueron a votar una expresión nacional y una nueva ola que claramente se viene”, afirmó.

Sin embargo, también destacó que la gestión local jugó un rol importante. El votante porteño, dijo, distingue las gestiones de Macri, Larreta y Jorge Macri, y esa comparación influyó.

Una nueva configuración en CABA

Para González, el mapa político porteño cambió de manera drástica. “Ese mapa amarillo totalmente, del sur al norte, era un voto heterogéneo, policlasista, polideológico. Se terminó”. El norte, que antes apoyaba al PRO, se volcó a La Libertad Avanza, mientras que el sur votó a Leandro Santoro, quien hizo una “elección bastante digna”.

Además, alertó sobre una eventual alianza futura entre sectores del PRO y el oficialismo libertario, pero excluyendo a Macri. “Hoy en La Libertad Avanza el Presidente de la Nación va por todo”, aseguró.

El preocupante nivel de ausentismo

La jornada electoral también estuvo marcada por una participación bajísima. “Ni en el 2001 ni en el 2003 la participación electoral ha sido tan baja”, lamentó González. Observó que muchos adultos mayores sí fueron a votar, pero que hubo una fuerte apatía juvenil.

Citando a un sociólogo, expresó una idea inquietante: “Los jóvenes de clase media alta se alejan de la Argentina y los jóvenes de clase media baja se alejan de la democracia”. Para González, esta desafección se relaciona con “las promesas no cumplidas” de la democracia en los últimos 40 años.