Industria pesquera: “No podemos siempre ajustar el tipo de cambio, sino se convertiría en una actividad de llorones”

El panorama de la industria pesquera también forma parte de lo que ocurre a nivel político y económico, posee regulaciones que afectan al sector local pero benefician a productores que vienen del exterior, lo cual generó cierto descontento. En este contexto, este medio se comunicó con el director del observatorio marítimo naval PESCARE, Daniel Coluccio.

“Lo que pasó con el sector fue que respondió firmemente y con una fuerte convicción, demostrando que el sector es pujante, dinámico, que no es prebendario y que de alguna manera llevó a luz un acercamiento hacia la opinión pública de lo que hace a diario”, comentó Daniel Coluccio. “En los últimos 5 años, el sector aportó 32 buques nuevos construidos en Argentina, con inversiones propias y privadas”, agregó.

Existe un gran diferencial entre la devaluación y el IPC

Posteriormente, Coluccio planteó: “Es un hecho destacable poder llegar a una actividad en donde la industria pesquera y naval están realmente gozando de un esfuerzo enorme por llevar adelante las exportaciones con un tipo de cambio y algunas variables que no son del todo convenientes”. Luego, manifestó que, “el tipo de cambio está teniendo un gran diferencial entre la devaluación contra un índice de precios al consumidor”.

“Los costos de las empresas se evalúan con el IPC, mientras que el producto a la venta está en un 9%”, sostuvo el entrevistado, que después completó: “Ese diferencial de un 60 contra un 9, es la falta de competitividad que tiene la empresa argentina frente a mercados mundiales que son altamente dinámicos y competitivos”.

Actividad de llorones

Por otro lado, el director de PESCARE señaló: “Para hablar de costos, eficiencia y competitividad no podemos siempre ajustar el tipo de cambio, sino se convertiría en una actividad de llorones”. Sobre la misma línea, remarcó que, “la actividad está acostumbrada al dinamismo y a la competitividad. El problema radica fundamentalmente en las diferencias que nosotros tenemos”.

“Nosotros compartimos el recurso, los mercados y los precios”, expresó Coluccio. “Lo que no compartimos es la cadena de costos, motivo por el cual hay una flota, que delimitada a una milla, tiene costos totalmente distintos a los nuestros”, finalizó.