La inflación anual de Chile se desaceleró más de lo esperado en agosto, lo que allana el camino para fuertes recortes adicionales a las tasas de interés, incluso cuando los responsables de la política monetaria monitorean el impacto de un peso más débil y las recientes inundaciones.
Precios al consumidor aumentaron un 5,3% frente a un año antes, menos que la mediana de las estimaciones de los analistas encuestados por Bloomberg, de 5,6%. Se trata de la tasa anual más baja desde septiembre de 2021. La inflación mensual se situó en un 0,1%, por debajo de todos los pronósticos de los economistas, informó el viernes el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
Un indicador de precios clave que excluye los artículos volátiles aumentó un 7,4% en 12 meses y cayó un 0,1% frente a julio.
La inflación de Chile está extendiendo su descenso hacia la meta de 3% luego de alcanzar un máximo de 14,1% el año pasado. Esa desaceleración ya ha permitido al banco central aplicar recortes de tasas consecutivos y señalar que se avecinan más reducciones. Sin embargo, los economistas advierten sobre numerosas amenazas a los precios, incluido un peso más débil, aumentos salariales y alimentos más caros tras las recientes inundaciones.
El peso llegó a caer 0,6% frente al dólar en las operaciones matutinas y alcanzó un nuevo mínimo del año por tercera vez esta semana. Las tasas de swap a dos años, un indicador de las expectativas de las tasas de interés, retrocedió 18 puntos básicos a 6,07%, su descenso más pronunciado desde julio.
Los costos de transporte bajaron un 0,2% intermensual en agosto, mientras que los artículos para el hogar disminuyeron un 0,3%, según el INE. Por su parte, la energía avanzó un 1,6% y los alimentos y las bebidas no alcohólicas se elevaron un 0,3%.
“El panorama de la inflación continúa mejorando en Chile y las perspectivas a corto plazo aún son benignas”, escribió en un informe Andrés Abadía, economista jefe para América Latina de Pantheon Macroeconomics. “Esto permitirá a los encargados de política monetaria seguir recortando las tasas de interés al ritmo actual durante las próximas reuniones”.
Expectativas inflacionarias
Los banqueros centrales estiman que la inflación llegará a un 4,3% en diciembre, para posteriormente desacelerarse a un 3% en el segundo semestre del próximo año, según su informe trimestral de política monetaria publicado el miércoles. Si bien tanto la lectura de la inflación general como el indicador subyacente continúan disminuyendo, los precios de los servicios han sido persistentes, escribieron.
Los responsables de política monetaria también reiteraron que los costos de endeudamiento terminarán el año entre un 7,75% y un 8%, por debajo del nivel actual, de 9,5%. Los encargados recortaron las tasas en un punto porcentual completo en julio antes de desacelerar el ritmo a una reducción de 75 puntos básicos este mes.
Los operadores encuestados por el banco central en agosto estiman que la inflación anual se ubicará en un 3% en dos años y que la tasa clave caerá al 5% en los próximos 12 meses.
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Sin embargo, los analistas han advertido cada vez más sobre la presión inflacionaria a corto plazo derivada de una depreciación del peso. Una moneda más débil fomenta el crecimiento de los precios al encarecer las importaciones, y Chile es vulnerable dado que compra bienes clave —incluida la mayoría de sus combustibles— en el extranjero.
El crecimiento de los precios al consumidor en países latinoamericanos como México y Perú continuaron su descenso gradual en agosto. Por otro lado, la inflación anual probablemente repuntó el mes pasado en Brasil, en gran medida debido a las comparaciones con el mismo período del año anterior, cuando se implementó una serie de recortes tributarios.
Traducido por Bárbara Briceño.
