El presidente peruano, Martín Vizcarra, anunció una serie de nuevas medidas a corto plazo para inyectar efectivo en la economía y mantener a las empresas a flote después de extender el estado de emergencia para detener el brote de coronavirus.
En un discurso televisado el jueves, Vizcarra enumeró medidas que van desde suspender las contribuciones obligatorias de pensiones por un mes hasta subsidios para trabajadores asalariados de bajos ingresos.
Al mismo tiempo, el banco central está trabajando con el Ministerio de Economía y Finanzas sobre un paquete de medidas “muy poderoso” para proporcionar a las empresas la liquidez que necesitan para seguir operando, dijo Vizcarra.
Perú está actuando para acelerar el estímulo fiscal y monetario a medida que el aislamiento social detiene la actividad económica mientras la pandemia mundial de coronavirus frena la demanda para el principal producto de exportación del país, el cobre. El país experimentó un repunte en las infecciones locales a 580, desde 480 el miércoles, lo que representa el mayor aumento diario desde que se informó el primer caso el 6 de marzo.
La última ronda de medidas del Gobierno busca dar un impulso a corto plazo a la demanda interna al poner hasta 5.700 millones de soles (US$1.700 millones) en los bolsillos de los trabajadores asalariados. Los pasos incluyen dejar que los trabajadores retiren hasta 2.400 soles de los ahorros de desempleo.
Además, las municipalidades recibirán 200 millones de soles para financiar la distribución de bienes esenciales entre los pobres, complementando el programa de entrega de donaciones en efectivo a 3,5 millones de familias de bajos ingresos, dijo el presidente.
Vizcarra dijo que el ejército ha llamado a 10.000 reservistas para reforzar las patrullas militares durante el estado de emergencia ya que demasiadas personas de ciertas áreas están desobedeciendo la orden de quedarse en casa. La medida de contención debía finalizar el 30 de marzo y ahora seguirá vigente hasta el 12 de abril.
