El presidente Donald Trump atacó a Turquía el viernes diciendo que el aliado de la OTAN no es amigo de EE.UU. y que había inventado acusaciones de espionaje contra un pastor estadounidense detenido en el país.
"Turquía ha sido un problema durante mucho tiempo", dijo Trump a periodistas mientras salía de la Casa Blanca el viernes para una recaudación de fondos en Nueva York. "No han actuado como amigos. Veremos qué pasa."
Las relaciones entre Turquía y EE.UU. están en un nivel muy bajo por la detención de Andrew Brunson, un pastor estadounidense que el gobierno del presidente turco Recep Tayyip Erdogan acusa de estar involucrado en un intento de golpe en 2016. Trump ha exigido la liberación de Brunson y ha sancionado a funcionarios turcos e incrementado los aranceles sobre el acero y el aluminio del país en represalia. Erdogan a su vez ha impuesto sanciones a los productos estadounidenses.
EEUU sancionará a Turquía si no libera a un detenido norteamericano
Un tribunal de apelaciones turco rechazó el viernes la solicitud de liberación de Brunson. La lira de Turquía finalizó una racha alcista de tres días para caer hasta un 8 por ciento el viernes.
"Hicieron esta acusación falsa de que él es un espía", dijo Trump. "Él no es un espía". Él está pasando por un juicio en este momento, si se puede llamar un juicio. Deberían haberlo devuelto hace mucho tiempo.
"Y Turquía, en mi opinión, actuó muy, muy mal", agregó. "No pueden retener a nuestra gente".
