En el programa “QR!”, que se emite por Bravo TV, se desarrolló este lunes por la noche un extenso debate sobre las políticas económicas actuales a partir del concepto de las “cuatro M”, una línea de continuidad histórica que vincula a José Alfredo Martínez de Hoz, Carlos Menem, Mauricio Macri y Javier Milei.
Durante el intercambio, el conductor Pablo Caruso citó declaraciones del diputado Miguel Ángel Pichetto, quien comparó el plan económico del presidente Milei con el modelo implementado por Martínez de Hoz durante la última dictadura militar. Según Caruso, Pichetto sostuvo que el actual programa económico retoma e incluso profundiza aquel esquema, basado en un dólar bajo, salarios comprimidos y reducción del Estado, algo que —según su análisis— no pudo concretarse plenamente en los años setenta.
Caruso recordó que el plan de Martínez de Hoz apuntaba a reducir los salarios del sector privado y público, promover despidos en el Estado y sostener un tipo de cambio bajo, un modelo que calificó como perjudicial para la producción, la industria, el turismo y el empleo, sin sectores claramente beneficiados. En ese sentido, mencionó investigaciones históricas que muestran cómo, pese a los ajustes sucesivos sobre salarios, emisión monetaria y tipo de cambio, la inflación persistió durante ese período.
En el mismo programa, el panelista Carlos Heller retomó el concepto de las “cuatro M” para señalar que, más allá de las diferencias discursivas, la discusión de fondo remite a dos modelos económicos contrapuestos. Según explicó, el actual Gobierno representa una versión más explícita de un enfoque que busca reducir drásticamente el rol del Estado, a diferencia de experiencias anteriores que planteaban objetivos similares con distintos grados de moderación.
Pichetto: "Este plan era el sueño húmedo de Martínez de Hoz"
Heller también advirtió sobre el deterioro del salario real desde la asunción de Milei. Señaló que no se firmaron convenios colectivos que hayan superado la inflación, lo que implicó una pérdida para los trabajadores formales, y cuestionó las lecturas optimistas sobre los ingresos de los trabajadores informales, basadas en encuestas y no en datos concretos.
En ese marco, alertó sobre las consecuencias a mediano y largo plazo de un mercado laboral cada vez más precarizado, especialmente en relación con el sistema previsional. Según indicó, el aumento de la informalidad podría derivar en futuras crisis de financiamiento y nuevas moratorias jubilatorias.
El dirigente también planteó un interrogante estructural sobre el rumbo económico: sin salarios ni empleo estable, sostuvo, se reduce la base de consumidores, lo que termina afectando al conjunto del sistema económico. Para Heller, el riesgo de este modelo es una profundización del empobrecimiento de la clase media, en nombre de una estabilidad macroeconómica que podría convivir con altos niveles de pobreza.
LB