El ingeniero industrial y analista financiero, Rubén Gramajo, conversó con Canal E y explicó por qué los resultados fueron tan negativos y qué oportunidades podrían surgir en este escenario para las entidades bancarias en relación al balance financiero.
Respecto del desempeño del sector bancario, Rubén Gramajo planteó: “Después de haber visto un poco los balances de los bancos de esta semana, la verdad es que los balances fueron malos. Nada diferente a lo que veníamos esperando, digamos, porque los argumentos de por qué el tercero tiene que ser malo, la verdad es que ya de antemano un poco lo conocíamos”.
El balance de los bancos con pérdidas
Asimismo, explicó que, aunque se esperaban malos números, el detalle mostró un panorama complejo: “Al ver los balances, lo que podemos hacer es afinar un poquito el lápiz o agarrar las lupas para ver los detalles”. Además, destacó que, “sin duda que fueron malos los resultados, casi todos los casos con pérdidas, salvo uno francés”.
Gramajo detalló uno de los problemas centrales del sector: “Los bancos han endurecido su scoring, digamos, y todo lo referido al crédito para personas y para empresas se complicó”. Y profundizó: “Uno de los argumentos principales de por qué fueron malos resultados es justamente la morosidad, digamos, que está en récord de las últimas dos décadas”.
Un nuevo panorama para los bancos
Sobre si este mal momento abre oportunidades para inversores, respondió: “Siendo optimista, yo creo que los bancos pueden llegar a ser una oportunidad de compra”. En la misma línea, argumentó esta posición en dos puntos, el primero es un castigo excesivo del sector: “Los bancos en lo que va del año, por ejemplo, fueron de los sectores que más cayeron”. En segundo lugar está la proyección de crecimiento económico: “Si también la economía argentina en el 2026 va a crecer en el orden de 4 o 5% de la mano del crédito, los bancos deberían ser, obviamente, actores fundamentales en todo esto”.
Para el entrevistado, la caída del tercer trimestre podría ser transitoria: “Si quiere ser optimista, debería pensar que los resultados del tercer trimestre fueron pasajeros y que lo que viene por delante debería ser un poco más promisorio”.