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Boom de cultivo de girasol: se registró un aumento del 30% de siembra

Juan Martín Salas Oyarzún, presidente de ASAGIR, destacó el “buen viento de cola que significan los precios internacionales.

Campaña del girasol
Campaña del girasol | Freepick

La campaña del girasol en Argentina muestra señales alentadoras, con estimaciones de siembra que alcanzan los 2,6 millones de hectáreas, lo que representa un incremento del 30% sobre el promedio de las últimas cinco campañas y un 18,2% interanual, según datos de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires. Así lo analizó Juan Martín Salas Oyarzún, presidente de ASAGIR, quien destacó el “buen viento de cola que significan los precios internacionales” y el impacto positivo de la caída de producción en Ucrania y Rusia.

Salas Oyarzún explicó: “Muchos productores se animaron a sembrar, con lo cual creció la superficie”, en especial en el norte argentino, donde “las condiciones han sido buenas, con lo cual el área se va a expandir principalmente en Chaco y norte de Santa Fe”. Al mismo tiempo, destacó que la tradicional zona del sur de Buenos Aires y La Pampa mantiene su protagonismo, aunque reconoció incertidumbres: “La zona del sur de la provincia de Buenos Aires es la zona de producción tradicional y típica del área girasolera, con lo cual esperamos que no decaiga el área, seguramente pueda crecer un poquito más”.

Además, Salas Oyarzún subrayó la expansión en el centro de Santa Fe y Córdoba, donde “muchos productores probaron y la verdad que el año pasado fue año récord de rinde a nivel nacional”. Para el presidente de ASAGIR, “la buena experiencia va a ser que el cultivo siga estando o sea más presente en esas regiones”, lo que fortalece la cadena por la diversidad de zonas y momentos de producción.

Uno de los desafíos para el productor de girasol es la relación insumo-producto. Salas Oyarzún remarcó: “El precio de la semilla ha venido subiendo en los últimos años, especialmente en los nuevos lanzamientos de las empresas”, aunque aclaró que “hay muchas empresas en Argentina de genética que tienen los precios estables”. Recomendó adelantarse en la compra para conseguir los híbridos más buscados, ya que en campañas de expansión “la disponibilidad para la venta baja mucho”.

Impacto de la baja de retenciones y reclamos de infraestructura

Consultado sobre la baja permanente de retenciones, fue claro: “La baja de retenciones siempre es una buena noticia, la baja impositiva en general es una buena noticia”. Aunque no impacta al girasol como a la soja, “siempre es 1, 2, 5 dólares más que en algunos casos cuando los números son ajustados pasa a ser muy importante dentro de la renta”.

Salas Oyarzún pidió que “con esa política de baja de impuestos, se alineen tanto los estados provinciales y municipales, especialmente estos últimos con enfocarse en lo que son caminos rurales”, y señaló que “para quienes vivimos en el interior, es un calvario casi permanente”.

Producción récord y perfil exportador

La Argentina produjo cerca de cinco millones de toneladas de girasol en la campaña 24-25. Salas Oyarzún precisó: “Tradicionalmente un tercio de la producción se molía y se consumía internamente, pero estos años... es mayor la proporción, si querés, tres cuartos, lo que se termina exportando. Eso implica un gran ingreso de divisas”. En los primeros cinco meses de 2025, el complejo girasol exportó un 25% más de divisas que el año anterior, logrando “un crecimiento fuerte de las exportaciones”.

La inestabilidad en la producción de girasol en Ucrania y Rusia, grandes jugadores del mercado, representa una oportunidad: “Europa habitualmente consume todo lo que produce, y los que tienen un fuerte saldo exportable son Ucrania y Rusia, y en otra escala estamos nosotros”. El reciente interés de India por el aceite argentino, ante rumores de sequía en los países del Mar Negro, impulsó precios y generó optimismo: “Tuvimos a la industria demoliendo, ofreciendo en Argentina precios interesantes ya para la próxima campaña. Eso es un faro importantísimo para el productor”.

Salas Oyarzún concluyó que este contexto internacional y local “planifica y ordena mucho de lo que es la producción, el nivel de fertilización e intensificación que uno le quiera dar” al girasol, permitiendo tomar mejores decisiones para la próxima campaña.