El analista del mercado de granos, Germán Iturriza, analizó para Canal E el impacto político y económico de las elecciones legislativas, la incertidumbre cambiaria y la reacción del campo ante la falta de definiciones.
Al analizar la coyuntura política y económica, Germán Iturriza planteó: “Cada partido hace su jugada, los oficialismos defienden su gestión y la oposición critica los agujeros de gestión que todo oficialismo tiene”. Según explicó, el productor llega a este proceso electoral “a la defensiva y a la expectativa de encontrar, a partir del lunes, un esquema cambiario con claridad para poder operar para adelante”.
Cuáles fueron los incentivos al campo
En cuanto a las medidas económicas que marcaron el año, recordó: “La primera baja de derecho a exportación temporal hasta el 30 de junio, donde el sector se vio parcialmente beneficiado”. Luego, “la segunda baja de derechos mucho más agresiva, al 0% con un cupo de 7.000 palos, con una lógica recaudatoria claramente”.
Sin embargo, Iturriza advirtió: “Corremos con un riesgo muy grande cuando se interviene en el mercado artificialmente bajando temporalmente un costo impositivo, porque después los actores van a esperar el mismo estímulo”.
En ese sentido, aseguró que, “el productor está a la defensiva, pero se está perdiendo una oportunidad”. Sobre la misma línea, añadió: “Le genera mucho miedo en su flujo tener 40 o 50 dólares extra por tonelada, que es un montón en este mercado global tan competitivo”.
La necesidad de reglas claras
Para el entrevistado, “necesitamos reglas muy claras para poder progresar en lo que es los ritmos de siembra y comercialización”. También se refirió al panorama financiero: “Me cuesta creerlo sinceramente por el nivel de ayuda financiera que necesitó el plan económico en los últimos 20 o 30 días”.
“El productor necesita saber qué contexto económico va a tener para organizar su flujo financiero”, remarcó, y recordó que, “es un sector que invierte y que entierra dinero por lo menos por seis meses”. Según explicó, muchos productores “podrían vender soja mayo de 2026 con un resultado positivo, pero esperan una medida económica, lo que yo llamo testarudez o necedad”.