En diálogo con Canal E, la tributarista Fernanda Laiún afirmó que la reforma tributaria que impulsa el Gobierno apunta a que las provincias compitan entre sí bajando impuestos y administrando mejor sus recursos para captar inversiones.
Un nuevo modelo fiscal para atraer inversiones
“Estamos hablando de una reforma impositiva integral que busca generar competencia entre provincias”, explicó la entrevistada , al referirse al nuevo esquema que el Gobierno nacional estaría impulsando. El objetivo es replicar modelos como el estadounidense, donde cada jurisdicción puede ofrecer incentivos fiscales para captar empresas.
Según Laiún, el centro de la discusión está en el IVA: “Lo que se busca es que el impuesto al valor agregado no se cobre íntegramente desde Nación, sino que las provincias tengan injerencia en la parte que se cobra por las ventas en su territorio”.
IVA provincial y autonomía fiscal
Laiún aclaró que esta reforma no implica eliminar impuestos como Ingresos Brutos, ya que “la Nación no puede decidir eso, porque es potestad de las provincias”. Sin embargo, recordó antecedentes como el Pacto Fiscal Federal de los ‘90, cuando se intentó reducir este tributo a cambio de concesiones nacionales.
“El camino que se busca hoy es otro: que una parte del IVA la recaude la Nación y otra la provincia, generando incentivos para inversiones en cada jurisdicción”, señaló.
Desafíos en provincias con baja actividad
El esquema propuesto genera resistencias, especialmente en provincias con poca actividad económica: “Hay provincias donde la parte que reciben del IVA hoy es más que proporcional a lo que podrían recaudar con un sistema de competencia”, indicó Laiún.
Por eso, anticipó que “va a tener que haber compensaciones por otro lado”. En ese sentido, el plan también apunta a un cambio cultural: “Las provincias deben rendir cuentas reales sobre lo que gastan, generar políticas públicas eficientes y atraer inversiones con reglas claras”.
Beneficios para provincias con recursos estratégicos
La reforma podría beneficiar directamente a provincias como Neuquén: “Ya es una provincia rica por el petróleo, puede darse el lujo de bajar impuestos y sostener su estructura”, afirmó. Pero otras, como San Juan o Catamarca, que dependen más de la coparticipación y tienen poca diversificación productiva, enfrentarán más desafíos.
En ese contexto, “el régimen de grandes inversiones (RIGI) puede ser clave, siempre que las provincias también ofrezcan un régimen tributario atractivo”, explicó Laiún.
Una reforma pendiente desde hace décadas
La tributarista destacó que “la ley de impuestos a las ganancias que rige hoy viene de la ley de réditos del año 1930, y el IVA tiene más de 50 años”. Por eso considera que el proyecto en marcha es profundamente transformador: “Nunca se intentó barajar y dar de nuevo en función de quiénes somos hoy y de las necesidades actuales del país”.
¿Cuándo se implementaría?
Aunque aún no hay fechas definidas, Laiún anticipó que “el gobierno está trabajando concretamente en esta reforma”. Los proyectos no circulan públicamente aún, pero existen y son disruptivos. “Requieren acuerdos políticos amplios, y es probable que se avance después de las elecciones”, estimó.
Finalmente, sostuvo que “las provincias deben cambiar su mentalidad, pensar con una cabeza renovada y entender que este modelo puede servir para el bien común y el progreso”.