Con el fin de analizar los resultados de un informe que estima una caída del 42% del área productiva y pérdidas económicas que superan los 113 millones de dólares luego de la excesiva cantidad de agua que cayó en los campos de la provincia de Buenos Aires, este medio se comunicó con el presidente de la Sociedad Rural de 9 de Julio, Hugo Enríquez.
“La situación viene mejorando, las precipitaciones fueron disminuyendo en el último mes ya”, explicó Hugo Enríquez, aunque aclaró que el exceso hídrico sigue condicionando la campaña. Según detalló, recién “a partir de mediados de noviembre pudimos empezar a trabajar un poco más firme sobre la siembra de cultivos de verano”.
Rejunte de actividades en el sector agropecuario
Asimismo, describió un escenario complejo en plena superposición de labores: “Se nos está juntando la siembra de soja de primera con el maíz tardío y con la siembra de los cultivos de segunda, porque ya arrancamos la cosecha de trigo”. En ese contexto, aseguró que los productores intentan “hacer lo posible por cubrir el área, la poca área que tenemos”.
Más allá del daño productivo, las inundaciones dejaron consecuencias directas en la vida cotidiana de las comunidades rurales. “Todavía siguen un par de escuelas evacuadas”, señaló Enríquez, y recordó que algunas instituciones “estuvieron cerradas, estuvieron dando clases por Zoom”. En uno de los casos, una escuela secundaria “se cerró hace dos meses atrás, por el agua”.
Leve mejor en la movilidad entre los distritos
Si bien destacó que, “los pueblos se mantuvieron conectados”, reconoció que aún “la superficie de agua cubierta en 9 de Julio sigue siendo muy importante”, aunque con una leve mejora en la transitabilidad.
El informe de la Sociedad Rural de 9 de Julio estima una reducción del 42% en el área productiva, con un fuerte impacto en toda la economía regional. “Esto lo vamos a notar en ingresos a partir de marzo del año que viene”, advirtió el entrevistado, quien remarcó que el efecto se extenderá “todo el año hasta marzo del año que viene”.
Las consecuencias, explicó, se sentirán en toda la cadena: “Va a repercutir en toda la cadena, tanto en los contratistas, en los fletes, en el comercio, en la industria y en lo local también”.