La analista internacional Fernanda Cornejo analizó las tensiones crecientes entre Estados Unidos y Brasil tras las declaraciones del presidente Lula da Silva durante la cumbre "Democracia Siempre", un encuentro que reunió a líderes del progresismo latinoamericano y al presidente del gobierno español, Pedro Sánchez. Allí se advirtió sobre el avance global de la extrema derecha, con una clara alusión —aunque sin nombrarlo oficialmente en el documento final— a Donald Trump.
Sin embargo, Lula no dejó dudas en su conferencia de prensa al referirse al republicano: “Es un gringo que se está metiendo con la soberanía brasileña y eso yo no lo voy a permitir”, lanzó el mandatario brasileño, en relación a la política arancelaria estadounidense. Según explicó Cornejo, la frase fue dicha al ser consultado por la guerra comercial entre ambos países, que podría escalar si Trump retoma la presidencia.
Además, la jornada estuvo marcada por un video que circuló en redes sociales de Donald Trump, generado por inteligencia artificial, en el que acusa sin fundamentos al expresidente Barack Obama de haber interferido en las elecciones de 2016. “Este tipo de contenidos, aunque no se presenten como evidencia real, buscan sembrar dudas en la opinión pública y movilizar a sus seguidores”, explicó Cornejo.
Escalada arancelaria: ¿puede sostenerla EE.UU.?
Consultada por el posible impacto de la nueva ofensiva arancelaria de Trump, Cornejo recordó que en el pasado el exmandatario ya impulsó medidas similares, a las que luego dio marcha atrás parcialmente. “En aquel momento hubo una ‘liberación arancelaria’ que afectó a más de 150 países, aunque luego se negociaron excepciones o acuerdos, como ocurrió con China”, puntualizó.
Frente a la posibilidad de una nueva guerra comercial, la especialista señaló que Estados Unidos podría enfrentar dificultades para abastecerse si pierde proveedores por las tarifas impuestas. “Habrá que ver cómo se reconfiguran actores como la Unión Europea, el MERCOSUR o los BRICS en este nuevo tablero geopolítico”, sostuvo.
En esa línea, consideró que aún con su poderío, Estados Unidos no puede subestimar el surgimiento de nuevas alianzas globales: “Es un escenario abierto que merecerá ser evaluado con más claridad a partir de agosto, cuando estas medidas empiecen a implementarse”.