El presidente de la Federación de la Industria Molinera (FAIM), Diego Cifarelli, analizó para Canal E la reciente baja permanente de retenciones anunciada por el ministro de Economía, Luis Caputo, el impacto en la cadena triguera, la falta de competitividad industrial y los desafíos estructurales que enfrenta el sector para exportar más y mejor.
“Nos tomó por sorpresa el día”, reconoció Diego Cifarelli sobre el anuncio. Sin embargo, aclaró que la señal va en línea con la visión del Gobierno: “Sabemos que es un gobierno que está preocupado por llevar a cero, realmente lo sabemos, lo conocemos, sabemos cómo piensa el Ministro, sabemos cómo piensa el Presidente, que todos los impuestos que distorsionan los costos productivos no les gusta”.
La industria molinera ve con buenos ojos la baja de las retenciones
Desde la Federación de la Industria Molinera, la baja fue recibida positivamente, aunque con una advertencia: “Ha sido bienvenido, obviamente, lo tomamos con mucho agrado, pero, claramente, nosotros lo que necesitamos es que desaparezcan por completo estos impuestos distorsivos que agravan la producción”. En ese marco, remarcó: “La Argentina tiene que tener claridad para poder producir y exportar, que es lo que nos va a engrandecer como país, ir a buscar más clientes al mundo”.
Para Cifarelli, el objetivo es claro: “Más temprano que tarde, estoy seguro que vamos a terminar asistiendo a la desaparición completa de los derechos de exportación”.
Las reformas estructurales también son necesarias para el avance del sector
Más allá del alivio impositivo puntual, puso el foco en las reformas estructurales que considera indispensables. “Nosotros creemos que las dos reformas enviadas al Congreso son superadoras de lo que tenemos. Tenemos realmente leyes vigentes que son de otro momento, de otro tiempo, que no son competitivas, que le quitan competitividad a las empresas”.
En ese sentido, el entrevistado defendió al empresariado frente a críticas recurrentes: “Estoy seguro y completamente convencido que el empresariado argentino quiere seguir dando trabajo, quiere dar más trabajo, quiere producir más. No es verdad que los empresarios quieren especular”. Y agregó: “Lo único que quieren los empresarios es poder comprar una máquina nueva, poder tomar un trabajador nuevo, y hoy las leyes no son amenazas a que eso suceda”.
En materia tributaria, comentó: “La cantidad de impuestos que hoy tributás para generar el precio final de tu mercadería es imposible”. Como ejemplo, planteó una paradoja estructural del sector: “Brasil es el primer comprador de trigo argentino y Brasil, comprando trigo argentino, es el primer exportador de panificados en el mundo”.