Cada vez más la tecnología aporta soluciones para mejorar la movilidad urbana y el transporte público. Telefónica acaba de presentar en la Argentina la herramienta Smart Steps, que utiliza datos móviles anónimos y agregados para calcular cuánta gente hay en una zona determinada. De este modo, los gobiernos pueden conocer los flujos de movilidad de los ciudadanos y adelantarse a sus necesidades.
“Smart Steps permite construir una consultoría de movilidad urbana para poder identificar flujos poblacionales. El insight que tomamos es la señalización que realizan los clientes de Telefónica a medida que se van moviendo. Cada vez que nosotros interactuamos con el celular, generamos una señalización móvil. Esa información, cuando se emite, se conecta a la antena Movistar más cercana y genera como una luz. El equipo de big data toma la información de las antenas, la ‘anonimiza’, se agrega (se agrupa) y se extrapola para representar un total de la población de la zona que quiero analizar”, explicó a PERFIL Sabrina Muñoz, gerenta regional para la monetización de grandes volúmenes de datos para Hispanoamérica en el Grupo Telefónica.
El municipio de la ciudad de Neuquén es el primero que ha decidido echar mano de esta herramienta para mejorar su transporte público. “Tenemos un primer proyecto de Smart Steps con la municipalidad de Neuquén, una de las ciudades más relevantes del interior en cuanto a movilidad urbana. Se van a utilizar los datos en pro del transporte público. La ciudad de Neuquén se va a dividir en diez áreas, y se va a calcular la cantidad de movimientos entre esas áreas como media del día útil durante cuatro franjas horarias”, detalló.
El objetivo es entender el movimiento de los ciudadanos para validar la ruta óptima del transporte público. “La ciudad de Neuquén va a instalar el primer metrobus en el interior. Para este momento es básico definir cuál va a ser la mejor ruta donde tendría que pasar ese metrobus. Ellos quieren dar esta información a la ciudadanía y poder validar los horarios de apertura y cierre de bancos, por ejemplo, para que los servicios estén más acordes a los requerimientos de la ciudadanía”, sostuvo Muñoz.
La ventaja de esta herramienta, aseguran, es que se superan las limitaciones de las tradicionales encuestas telefónicas o domiciliarias, que sólo permiten recoger el punto de vista de un número limitado de personas. “Lo bueno de esta metodología es que refleja un comportamiento real de las personas. Nos permite trabajar con datos objetivos, masivos y, al mismo tiempo, anónimos”, concluyó.