Es interesante y merece respuesta la carta enviada por la psicóloga y periodista Liliana Hendel, publicada en el Correo de hoy. Involucra a este ombudsman y a la Defensora de Género de PERFIL, Diana Maffía, quien tal vez tenga algo para decir en su columna del domingo venidero. Para ampliar información: Hendel es una reconocida activista por los derechos de las mujeres y de personas y colectivos que se encuadran en otros géneros, además de haber tomado parte activa en las jornadas que precedieron a las votaciones por un aborto legal, seguro y gratuito durante 2018. Es la fundadora y coordinadora actual de la Red Internacional de Periodistas con Visión de Género en Argentina, y forma parte del Consejo del Fondo de Mujeres del Sur.
Su texto dispara una vez más la inquietud expuesta en esta columna cada año en marzo, cuando se celebra en el mundo el Día Internacional de la Mujer, procurando una mayor participación femenina en los medios de comunicación, particularmente en PERFIL. Con el título "Y por casa, ¿cómo andamos?", contabilicé el 10 de marzo de 2018 la presencia de varones y mujeres en las páginas, la conducción y la edición de este diario, enfatizando que, aunque con cifras más equilibradas que en años anteriores, se mantenía entonces una disparidad notable tanto en los artículos informativos publicados como en las columnas de opinión y en los cargos de conducción. Meses después, cuando la Dra. Maffía se incorporó a este medio, recordé en mi columna (al darle la bienvenida) un párrafo de aquel espacio de marzo, en el que destacaba los cambios notorios en la conducta social en relación con la mujer: “Es un viento fresco el que se siente con intensidad cuando la presión de sectores históricamente marginados, sometidos, postergados, discriminados en las sociedades de todo el mundo, contribuye a correr –poco o mucho– el velo que pretende ocultarlos o mantenerlos en esa situación, y obliga a aflojar o soltar la cuerda que tiene al poder en el otro extremo”.
Reflexión en vacaciones e invitación, por Diana Maffía, defensora de Género de Diario Perfil
Es refrescante leer y escuchar voces como la de Hendel, que buscan acompañar a la dirección de PERFIL en el difícil camino de emparejar internamente la participación de varones y mujeres. Sin embargo, debo coincidir con ella en que falta aún bastante trecho para lograrlo. En la edición de ayer –por solo poner un ejemplo cercano, inmediato–, solo 13 de los 42 notas y artículos informativos publicados con firmas (se excluyen las basadas en envíos de agencias o suscriptas por el genérico Redacción PERFIL) fueron de mujeres; de 24 columnas de opinión, siete mujeres y 17 hombres fueron sus autores. En el staff de conducción de la redacción, dos varones y una mujer figuran en la jefatura; cuatro a una es la relación en el plantel de editores/as jefes/as; 3-2 en la nómina de editores/as y 5-3 en la de subeditores/as.
Para finalizar, dos aclaraciones necesarias, que tienen como intención aclarar algunos interrogantes que surgen del envío de Hendel:
◆ El título “Escriben” se emplea para identificar en la portada la autoría de columnas de opinión destacadas por sus contenidos y por las autorías; una de ellas, los domingos, es la de Maffía, con textos muy cargados de opiniones; otra habitual, los sábados en la sección Escritores, es la de Pola Olaixarac.
◆ Que las cartas sean mayoritariamente de varones no es acto de discriminación sino fruto de una realidad: menos de un diez por ciento de los e–mails que se reciben tienen firmas femeninas, y no todos llegan a la categoría de publicables. Sería bueno que las mujeres ocupen un mayor espacio con buenas y valiosas contribuciones.
