El pasado martes desembarcaron en Córdoba los principales ejecutivos de Aerolíneas Argentinas, encabezados por su presidente, Pablo Ceriani, y el director Comercial, Fabián Lombardo. El objetivo fue dar a conocer la programación de vuelos de la compañía desde el hub del aeropuerto local, que fue anunciada en el hotel Neper. Las autoridades de la aerolínea de bandera fueron presentadas por el senador Carlos Caserio, quien ofició de ‘anfitrión’.
En diálogo con PERFIL CÓRDOBA, Ceriani desestimó que la empresa esté conducida por La Cámpora y dijo que “Córdoba es un hub muy importante para Aerolíneas que conecta destinos del norte con otros del sur y porque muchos pasajeros, sobre todo del centro del país, lo eligen como aeropuerto de conexiones”.
–Hay anuncios muy importantes para el hub.
–Así es y uno de esos anuncios es el vuelo directo a Rio de Janeiro, con tres frecuencias semanales en enero y febrero. Eso convierte al aeropuerto local en el de mayor movimiento internacional del interior del país, después de Buenos Aires.
–Con Punta del Este o Montevideo, ¿tienen algo previsto?
–No, a esa ruta por ahora la vamos a seguir operando desde Buenos Aires e iremos viendo cómo responde la demanda y, en función de ello, pondremos más vuelos.
–¿Cuáles son los objetivos en una mejor situación sanitaria, como la actual?
–Lo primero es recuperar el tráfico que teníamos antes de la pandemia. En lo que son los vuelos domésticos, pensamos que en temporada alta va a estar recuperado en un 80% y para julio de 2022, en la temporada alta de invierno, puede estar en un 100%. En cuanto al tráfico internacional se va a ir recuperando paulatinamente durante el año próximo.
Esto de la pandemia, para nosotros, es barajar y dar de nuevo así que en función de cómo vaya respondiendo la demanda y las necesidades que tenga la población –que van a ser distintas a las existentes antes de la pandemia, porque esto se va reconfigurando– vamos a ir incrementando los vuelos.
–Las tarifas están altas, ¿se puede esperar que el mercado modifique esto?
–Las tarifas dependen mucho de cuánta oferta haya; en aviación comercial, las tarifas se asignan automáticamente según la relación entre la oferta y la demanda. Como la oferta está acotada, las tarifas están un poco desbalanceadas, pero en la medida en que vayamos poniendo más oferta, se van a ir reacomodando como para que sean accesibles para todos.
–En ese juego de roles o reparto de ‘parcelas’ que se le adjudica al Gobierno, se dice que Aerolíneas Argentinas ‘es de La Cámpora’. ¿Lo es?
–No. Aerolíneas Argentinas no es de La Cámpora, es de los argentinos y está al servicio de los argentinos. Los planes de crecimiento de la compañía fueron siempre más o menos los mismos; sí es verdad que tuvimos un gobierno que quiso achicarla y jugó a favor de otras compañías. No es el caso del actual Gobierno nacional, que obviamente juega a favor de Aerolíneas porque la considera un pilar del desarrollo y ha demostrado que es una herramienta necesaria, tanto para ese desarrollo como para, por ejemplo, traer al país las vacunas contra el Covid-19 para aliviar la situación sanitaria de la población.
–¿Qué share del mercado tiene actualmente la compañía?
–Es muy variable, porque depende mucho de la oferta, pero hoy estamos en un 70%. Tradicionalmente, en el mercado doméstico, el share de AR varió entre el 60% y el 80%. Cuando estuvimos nosotros en el anterior periodo (hasta 2015) llegó al 80% y cuando asumimos nuevamente (2019) estaba en poco más del 60%.
–También se insiste mucho con las pérdidas de AR.
–Esta es una situación muy particular, en la que todas las aerolíneas estamos a un 60% a 80% de la operación, con lo cual la situación financiera de todas las compañías, y de Aerolíneas en particular, va a estar desbalanceada hasta que se pueda llegar al 100% del tráfico lo cual va a pasar, a nivel mundial, recién en 2024 y 2025, según la mayoría de las proyecciones. Hasta entonces, todas las aerolíneas estamos con una situación de desbalance que con la comunidad internacional vamos a tratar de sobrellevar, minimizar y racionalizar de la mejor manera, para poder ser sustentables. En 2020, el déficit estuvo en el orden de los US$500 millones y se va a ir achicando en la medida en que se recupere el tráfico.
Creemos que el turismo internacional va a crecer considerablemente en el país y en ese contexto Córdoba va a tener un rol significativo. El éxito del plan de vacunación hace que Argentina sea un destino aceptado y atractivo y, si a eso le sumamos otras medidas que se están tomando como el programa PreViaje –que muestra un éxito rotundo, lo vemos a partir del aumento de las reservas–, podremos tener una temporada muy fructífera.