En medio de un verano sin muchos arribos de figuras nacionales, por el contexto de pandemia y a pesar de las elecciones legislativas de este año, la escala del fin de semana en Córdoba de la exministra de Seguridad macrista, Patricia Bullrich, sirvió para alinear la tropa en Juntos por el Cambio. Con la caliente interna radical, y con algunos coletazos que quedan de la disputa en el seno del PRO local, la escala cordobesa de Bullrich para presentar su libro Guerra sin cuartel le puso un condimento extra al verano cordobés.
Una agenda que comenzó el viernes con reuniones con empresarios y miembros del partido amarillo en Córdoba, continuó luego con la presentación del libro en horas de la tarde en Carlos Paz, y siguió ayer con distintas actividades en la villa serrana, Bullrich dejó un mensaje de “unidad” a los socios de la coalición y ratificó la bendición de los pesos pesados del macrismo a Gustavo Santos, el exministro de Turismo de Mauricio Macri que es número puesto para encabezar las listas en Córdoba.
De hecho, el lugar privilegiado de la gira de Bullrich fue para el también integrante de los gabinetes peronistas en Córdoba; gesto que más de uno de los socios cordobeses interpretó a la perfección y también optó por una foto individual con Santos en su álbum.
Sí a las Paso y pedido de calma a la interna PRO. Desde el arranque, varias de las consultas individuales como así también las charlas que tuvo con varios en conjunto, tuvo como eje principal el futuro de las Paso. Y a todos, Bullrich les manifestó su análisis: “no se van a suspender. A lo sumo, se pueden postergar”.
Frase a la que le agregó su propio pronóstico optimista: “en Córdoba hay chances de sacar más votos que en las intermedias del 2017.
Pero -advirtió-, dentro de Juntos por el Cambio, todo; fuera de la coalición, nada”. Con este mensaje, la extitular de la cartera de Seguridad de Macri dejó en claro que el mensaje de contención para todos.
Incluso, para aquellos que no forman parte del armado por ahora y pueden ser una amenaza por derecha. Como aquellos que en Córdoba empezaron a referenciarse con los sectores que a nivel nacional lideran José Luis Espert y Javier Milei.
Los que estuvieron cerca de Bullrich el fin de semana reconocen que “recorre el país en modo campaña”, y colocan entre sus méritos el teléfono abierto permanentemente. “Atiende a todos. Desde los top, a los chicos de la Juventud (que ayer le cantó ‘Patricia presidente’), pasando por la militancia en general. Y eso, después de lo que fue la presidencia de (Humberto) Schiavoni, es mucho. Responde todos los WhatsApp”, dicen y agregan: “está recorriendo con futuro de fórmula en 2023”.
Bullrich siempre estuvo al tanto del minuto a minuto de la interna amarilla y de la disputa entre Javier Pretto y Soher El Sukaría. Al punto que incidió, al igual que Horacio Rodríguez Larreta para que la sangre no llegara al río; aunque quedaron cabos sueltos: las disputas en los departamentos Colón y Santa María. Y en esta oportunidad, se juntó con dirigentes de los dos distritos: quiere unidad total.
A nivel provincial, el cambio de autoridades es en abril y quiere cerrar filas antes de esa fecha.
Aquellos que conocen el pulso del espacio amarillo repararon en un dato: el faltazo de dos monzoístas en la visita de Bullrich, el diputado nacional Gabriel Frizza y el legislador provincial, Darío Capitani. Dos con peso y de línea directa con Emilio Monzó y Nicolás Massot.
El contacto con los top. Más allá de Santos, la exministra también le dio un buen lugar a la senadora Laura Rodríguez Machado, tuvo contacto privado con Mario Negri y recibió la visita Ramón Mestre, Luis Juez, Oscar Aguad, Héctor Baldassi y Gregorio Hernández Maqueda, entre otros. Algunos con más protagonismo que otros, a todos les bajó el mensaje de unidad.
Todas caras que, aseguran varios, se repetirían si el que viene en lugar de Bullrich es Rodríguez Larreta. “Forma parte del constante equilibrio de los halcones y las palomas”, contó una fuente a este diario.
Nadie en Córdoba, dentro de los pesos pesados de la coalición, se anima al desaire. La exfuncionaria, en términos de recorrida opositora, se transformó en los ojos de Macri en cada provincia, por lo tanto, lo de este fin de semana será reportado al expresidente.
Sobre todo, por tratarse del distrito favorito de Macri.
A la hora de cuidar el territorio, Bullrich llegó con claridad acerca de cómo manejarse con los socios locales, quiénes asoman como el futuro, con quiénes los referentes nacionales se deben una charla y cuáles son aquellos a los que se le complica la continuidad.
Panorama que posiblemente sea aún más claro si existe una visita de Macri en los próximos meses para presentar en sociedad su fundación. “Es esperable que Mauricio elija Córdoba para volver al ruedo, y el argumento de la fundación es tentador. Pero depende de él”, dijo un conocedor del paño.
